Antonio Trujillo 'Catalán grande'

Carnaval de Cádiz 2020

Antonio Trujillo, ‘El Catalán’: “No quiero el Antifaz de Oro, le tengo antipatía”

El mítico intérprete de 'Charlotte' rechaza el Antifaz de Oro del Carnaval de Cádiz 2020

Antonio Trujillo ‘Catalán’: “Paco Alba fue muy bueno pero Antonio Martín lo superó”

Por  7:02 h.

Director de directores. Una voz histórica y uno de los grandes ídolos del Carnaval de Cádiz. Antonio Trujillo, ‘El Catalán Grande’ ha sido designado Antifaz de Oro  en 2020. Casi medio siglo ha tenido que esperar el mítico intérprete de ‘Charlotte’ para recibir un galardón que él mismo reconoce que le llega tarde y que no recogerá el próximo mes de marzo. Sin embargo, el no llevar en la solapa esta insignia es sólo una anécdota más para un componente que lideró grupos antológicos de autores como Aguíllo, Fletilla, Enrique Villegas, Antonio Martín, Pedro Romero, Antonio Bustos o Luis Ripoll. Una enorme enciclopedia del Carnaval de Cádiz y todo un referente de la comparsa.

 

-Antonio Trujillo, Antifaz de Oro de 2020. ¿Qué le parece que se hayan acordado de usted después de tanto tiempo?

-Yo le agradezco a Antonio Rivas que se haya acordado de mí, pero este Antifaz llega tarde. El Antifaz es algo que no le doy valor, una cosa que no me inspira tenerlo, la verdad. Hay un desbarajuste grande entre los Antifaces, partiendo de que el requisito principal es haber salido 25 años en Carnaval. Hay gente que en pocos años han hecho historia en el Carnaval de Cádiz y otros que en 50 han pasado sin pena ni gloria. Yo no puedo llegar a entender que un postulante, por ejemplo, haya tenido el Antifaz de Oro antes que mi hermano y yo o que gente como Antonio Martínez Ares o Juan Carlos Aragón. Fue precisamente cuando se lo dieron al Pucherito, que en paz descanse, cuando dejó de tener sentido para mí este galardón. Estoy de acuerdo en que se merecía un gran homenaje, pero el Antifaz debería estar para otra cosa. Por eso, no recogeré el Antifaz. No lo quiero; le tengo antipatía.

 

-Y su hermano, ¿lo hubiera recogido?

-Yo no sé si me sobrina Merche lo recogerá porque no he hablado con ella. Pero estoy seguro de que si mi hermano estuviera vivo tampoco lo hubiera recogido, al igual que tampoco lo hubiese recogido Juan Carlos Aragón. Recuerdo una última conversación con él, que me lo encontré en el Paseo dando una vuelta y nos paramos a hablar. Me dijo que él hasta que gente como yo o mi hermano y algunos más no tuviésemos el Antifaz, que él no lo iba a coger. Pero no lo tuvo que rechazar porque no se lo dieron en vida. Ha tenido que fallecer para que se acuerden de él y se lo den a título póstumo, como al Peña. Con lo que ha hecho Juan Carlos por el Carnaval y con el legado que ha dejado. No tiene ningún sentido.

 

-¿Le ha dolido lo poco que se ha hablado de un icono del Carnaval como fue su hermano Pedro?

-Es una lástima lo poco que se han acordado de mi hermano en todos estos años. Es cierto que él como persona tenía un carácter fuerte y raro, pero dejando de lado a la persona, Pedro ha sido mi hermano en el Carnaval y ha hecho mucho por esta fiesta. Se comía el escenario y lo hacía porque lo sentía. ¿Y se acuerdan ahora de él, cuando ya no está?. Nunca se han acordado de él y si no hubiera tenido una hija que se llama Merche, menos se hubieran acordado. Con una mano se pueden contar las personas del Carnaval que fueron a su entierro.

 

-¿Se ha sentido infravalorado todos estos años, en los que nadie le ha propuesto para el Antifaz a pesar de su trayectoria?

-Me duele en el alma que no se hayan acordado de mí. Sobre todo, porque gente que ha salido conmigo y ha conocido de primera mano lo que yo he hecho en Carnaval, como Aurelio del Real o El Galleguito, no se acordaron de mí cuando tuvieron la posibilidad de dármelo. No valoraron el trabajo que hice y que ellos conocían bien. ¿O no he hecho yo méritos para un Antifaz?. He salido con casi todos los grandes poetas, excepto Paco Alba, y he hecho músicas para agrupaciones como Los playboy, Los Golfos, Los húngaros gitanos… Creo haber hecho algo en el Carnaval de Cádiz. A mí me duelen esas cosas. Sobre todo, me dolió muchísimo el año de ‘El Revuelo’, cuando volví al Falla. Pensé que ahí iban a acordarse de los hermanos Catalanes, pero tampoco. Se han acordado a los quince años de ‘El Revuelo’ y con seis personas más. Yo no quiero el Antifaz. Además, ¿para qué sirve?. Para lo único es para ir al Falla cuando llega el Carnaval. Pues que se lo queden.

 

-¿Nunca se lo ha echado en cara o se lo ha reclamado a los que han presidido la entidad?

-Jamás. Nunca les he dicho nada ni les he reclamado nada. Para orgulloso, no me gana nadie. Que quede en la conciencia de los que no me lo dieron.

 

-Autores de la trayectoria de Antonio Martín hablan de usted como el mejor director que ha tenido el Carnaval de Cádiz, ¿Qué tenía Antonio Trujillo que no tenían otros?

-Yo creo que era la manera de llevar los ensayos. Cuando estuve de gira con ‘Los Beatles de Cádiz’ aprendí mucho y me quedé con la sabiduría y los métodos de todos los grupos y bandas que conocimos. Cuando llegué a Cádiz intenté inculcarlo en el Carnaval y todo lo que aprendí me sirvió de mucho. Como director, lo primero que tenía que tener era disciplina. Corregía muchas facetas. Enseñaba a cantar a los segundas. Metía las octavillas, los contracantos, que en el Carnaval no se conocían aún. Siempre he tenido mucho oído y captaba lo que hacía mal cada uno. También le daba el sitio a cada persona. Se me conocía por mi seriedad pero yo no era de gritar ni pelearme con nadie. Si los componentes no cumplían, los echaba a la calle, eso sí, pero nunca le he chillado a nadie y me he reído y divertido mucho.

 

-Antes se le daba casi más importancia al director que al autor. Ahora apenas se conoce a los directores o son los propios autores los que ejercen la dirección musical. ¿A qué se debe?

-Ahora director es cualquiera. Para lo que hacen, cualquiera podría encargarse de esa labor. Hay pocos que sepan de qué va la cosa, la mayoría de los directores no sabe montar ni un grupo ni una agrupación y necesitan al autor o a otra persona al lado que se encargue. Antes, llevabas a un grupo pero también montabas las músicas, afinabas…Yo recuerdo que la gente se peleaba por salir conmigo y Antonio Martín me decía que era de otra galaxia. A mí me llamaba el autor y me cantaba lo que fuera, y ya yo era el que lo cantaba y el que lo montaba. Antes los autores confiaban para todo en el director pero hoy en día ya no existen ese tipo de directores.