A Jorge Drexler se le adivinaba nervioso al comienzo del pregón. Titubeaba un poco y no tenía una voz firme. Pero hizo la primera broma y el público respondió con risas y aplausos. Se tranquilizó. Cantó la primera canción, ‘El Tamborero’, y el público bailó, cantó y aplaudió. Y Drexler comenzó a sonreír. Seguía su ‘pelea’ con el agente Gómez y el público coreaba «pregonero, pregonero» y la alegría no se le borró de la cara. Al terminar el pregón estaba emocionado y repitió «gracias» en prosa y besos.
Carnaval
Un pregón en sonrisas
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, 1:27 h.