Más corto en el fondo y más largo en las formas

La primera fase del concurso ha transcurrido más rápida al durar sólo once días, pero las funciones se han eternizado hasta conseguir vaciar el Falla

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Se acabó lo que se daba. Y no podemos decir, como otros años, que, al menos, haya sido de momento porque mientras leen estas líneas, ya hay gente preparándose para cantar en el Falla. Es lo que tiene la cercanía entre la Navidad y el Carnaval, que provoca que todo transcurra más rápido. Finalizada la primera fase es buen momento para analizar lo que han sido los once primeros días de coplas en el Falla.
lo mejor
Tema de entradas
No ha habido reventas
Lo anticipó Vicente Sánchez, lo corroboró Paco Cárdenas, pero sus declaraciones oficialistas han terminado encontrando refrendo en la realidad. No ha habido reventas. El sistema de venta de entradas, algo confuso al principio, ha conseguido que los alrededores del Falla estén vacíos antes de las sesiones y que los reventas a esa hora se dediquen a ver la serie Arrayán.

Menos funciones
La primera fase se hace más corta
Algo bueno tenía que tener la cercanía entre la Navidad y el Carnaval. Indirectamente ha provocado que la primera fase tan sólo dure once días cuando la media de años anteriores se situaba en una media de trece o catorce.
Calidad de los grupos
Pocas cosas insoportables
Hasta hace poco tiempo el galllinero formaba un auténtico cachondeo con determinadas agrupaciones. Sin embargo cada vez hay menos cosas que realmente no se puedan escuchar. Eso no quita que haya habido cachondeo, que lo ha habido.

Engrandecen la clasificatoria
Sorpresas agradables
Como hay que mojarse pongamos tres ejemplos prácticos: el retorno del antiguo grupo del Tino, la chirigota de Quique El Remolino o el coro de Toledano y Martínez. No estuvieron en la Final de 2007, no son grupos «mediáticos», pero desde el principio apuntan muy alto.

Lleva el Carnaval a los hogares
La tele
Entre la confusión del sistema de venta de entradas al principio y la dejadez de algunos, ha habido mucha gente que no ha podido ir al Falla. Y la tele les lleva el Carnaval a casa. Bien Germán. Una fiesta divertida es bueno que te la acerque un tío divertido y que además sabe. Quique El Largo ha despertado tantos elogios como críticas.
lo peor
Los inicios
Butacas vacías en el teatro
Parece demostrado que el sistema de venta de entradas ha erradicado la reventa, independientemente de lo que ocurra en la Final. Pero al principio, entre los errores técnicos, el desconocimiento de otros y el terror de muchos, daba pena ver el patio de butacas.

Horario
Funciones muy largas
Un espectáculo que vive su fase previa no puede acabar a las tres y pico de la madrugada. Y más con el sistema de cabezas de serie, si de doce agrupaciones, sólo tres son buenas, lo cierto es que a la última sólo la escuchamos los sufridores de los medios.

Incógnita
¿Se guardan lo mejor?
Está en boca de todos. Los grupos de los que se esperaba lo mejor no han dado la talla. En el inconsciente colectivo de todos susbiste la teoria de que, con el tema de los dos cortes, se han guardado lo mejor. Veremos a ver.

Los cuartetos
El público enloquece
En clasificatorias, el personal se vuelve loco y se pone en pie casi con cualquier cosa. En semifinales, ya nadie suele reírle las gracias y todo el mundo está esperando a la comparsa siguiente. Ya en la Gran Final, su presencia parece el momento reservado para el vaso en el ambigú.