ACTUACIÓN DE LOS LUCEROS EN LA FINAL DEL COAC
La comparsa de Noly, Aranda, Chapa y Subiela no necesitó ir al pasado para diferenciarse. Ellos, desde que se juntaron, vivían en el estilo de la comparsa de los noventa. Aún así, parece que este año el grupo trajo su comparsa menos reconocible. ‘Los Luceros’ han sobrevivido en el Concurso por el virtuosismo en las letras de Miguel Ángel García Argüez. El Chapa ha dejado una nueva colección de pasodobles inolvidables que de nuevo le han servido para estar en las quinielas como una de las favoritas.
Desde lo alto del faro la vida tiene que ser más calmada, hay más paz cerca del cielo que cuando vivían en el alambre o dentro de la jaula. Durante el concurso no se observó esa garra del que siente miedo y que tanto conectaba con la pasión. Hubo menos rabia tanto en el pasodoble como en la presentación durante las fases anteriores. Y esa era una de las notas que los diferenciaba del resto. Aún así, sus letras habían estado a la altura de los mejores durante el Concurso.
Pero en la final iban a cambiar las formas y las tornas. La disposición en el Faro les había limitado demasiado durante el Concurso y en la última noche dejaron la torre para cantar más cerca del precipicio. Pareció otra la presentación. Volvió a aparecer la rabia y el público otra vez en el bolsillo.
El Chapa de nuevo se puso manos a la obra para dejar otra pieza escandalosa. El pintor de películas en el pasodoble trajo esta vez una historia de amor de dos cuerpos en la oscuridad. Le cantaba la comparsa al amor entre dos personas invidentes. La idea se vio venir pero no por ello fue menos deliciosa. Gran primera letra de un grupo que siempre alcanza el sobresaliente en esta parte del repertorio. En el segundo el poeta volvía con ese arte solo al alcance de unos cuantos en esto de hacer coplas. La lagrima como medio para desgranar los estados de ánimos y describir al final las lágrimas que alguien suelta cuando nace un hijo. No hubo reivindicación en la final. Ellos apostaron por la literatura y la sensibilidad. En cualquiera de los campos se siente cómodo el poeta y esta vez volvieron a destacar.
En la tanda bajaron el nivel. Un cuplé a Padilla y otro repetido cantado en cuartos. Ambos dieron paso a una última pieza que como la presentación, sonó mejor que nunca. Ellos parecían que estaban un peldaño por debajo de las favoritas, pero en esta Final se pusieron el traje de gala para ofrecer la mejor cara del grupo en todo el Concurso. Ellos comienza pegando primero, ahora hay que superarlos. Cuidado con ellos.
FOTOS: comparsa LOS LUCEROS