correctamente todas las aspirantes a convertirse en ninfas del Carnaval. Esta
cuestión es una de las fijas que todos los años se realiza a las candidatas
durante la entrevista que lleva a cabo la Delegación de Fiestas para elegir a
las nueve jóvenes que representarán a la mujer gaditana a partir del mes de
enero y durante todo un año.
Sin embargo, no sólo hay que conocer a este
importante coplero para llegar a hacerse con un hueco en la elección, pues
también hay que conocer con exactitud todo lo referente a la cultura gaditana.
En el apartado de Carnaval, las jóvenes tendrán que responder preguntas
relativas al número de componentes que tienen las agrupaciones que se presentan
al concurso, la identidad del Tío de la Tiza o las diferencias entre un
pasodoble y un cuplé.
No obstante, no sólo el Carnaval ocupa un lugar
preferente en la entrevista, pues los representantes del jurado exigen a las
futuras ninfas una formación en cuestiones generales que afectan a la vida
política y social de la ciudad. En este ámbito, se incide en el conocimiento de
los nombres de los concejales del Ayuntamiento, e incluso el del presidente del
Gobierno y el de la Junta de Andalucía. Estas respuestas son consideradas de
gran importancia para el jurado, pues una de las mayores exigencias será todo lo
concerniente a la formación.
Por este motivo, también cobrará especial
protagonismo este año durante la entrevista el papel de Cádiz durante la
celebración del Bicentenario de la Constitución de 1812, y por ello, se
elaborarán cuestiones referentes al monumento de Las Cortes, a la Pepa o a los
lugares que tuvieron mayor protagonismo en la promulgación de la Carta
Magna.
¿Cuántos puentes existen en La Caleta?, ¿Quién es Pemán?, ¿Por qué
se quema el Dios Momo? o ¿Qué mar baña a Cádiz? son otras de las preguntas que
pueden realizarse durante la entrevista.
Sin embargo, no sólo la
formación cultural y el conocimiento de la historia de la ciudad son valorados
por el jurado. Las habilidades artísticas también son claves a la hora de la
elección, de ahí que todas las candidatas tengan que bailar un tanguillo
gaditano durante la entrevista, e incluso en ediciones anteriores se ha pedido a
las jóvenes que interpretasen otra pieza musical como un rock and roll o que
cantasen alguna canción o pasodoble.
Muchas de las aspirantes también
dejan su sello propio y se atreven con otro tipo de retos como contar algún que
otro chiste para demostrar su valía y sus cualidades
artísticas.
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