VALORACIÓN DE LA SAGRADA FAMILIA EN CUARTOS: AQUÍ SE QUEDA 
La comparsa de Barbate sonó mejor en este pase de cuartos que en la función de preliminares. El llegar y pegar, o el venir y mantenerse. Ellos apostaron por lo segundo. Un buen segundo pasodoble fue lo más destacado de la actuación de esta comparsa en cuartos de final. El grupo no desentonó, de hecho mejoró, pero la competencia es terrible y ellos no se han diferenciado.
En la primera letra le cantaban a los problemas de salud de una mujer. Era una sentida pieza a la fibromialgia que sufren tantas mujeres en la sociedad. La segunda fue una durísima letra a la Iglesia. Ellos le cantaban a sus niños para decirle al Vaticano que en su Sagrada Familia a los niños no los toca ni Dios. Mucho mejor este segundo por el desarrollo y el feroz remate.
En el primer cuplé contestan estos curas al pasodoble de Martínez Ares del año pasado. En el segundo hablan de la pobre economía que ellos tienen que soportar como párrocos que son. Peor esta Dios que lleva 2018 años sin cotizar, remataban. En ambos cuplés es Dios el que contesta para rematar. Mejor ambas ideas que el final. Con un popurrí muy bien interpretado por estos barbateños se marcha una comparsa que a pesar de lograr desarrollar una buena idea no parece que haya dado un golpe certero para meterse entre las aspirantes.