María es una joven onubense aficionado al Carnaval que hoy ha dado una auténtica lección de cómo tomarse las bromas en estas fechas de febrero, en tiempo de Carnestolendas. A primeras horas de la mañana, colgaba un vídeo en Twitter bailando una de las nuevas cuartetas del popurrí de la chirigota del Canijo, ‘Chernobyl, el musical’. “Una mané, en la otra orejé, y la otra mané…”
Ya tengo cuarteta favorita ????#ChernobylElMusical pic.twitter.com/iJy236s49x
— Mariquilla (@MaariaSieerra) February 17, 2020
Algo habitual, pero que en esta ocasión tiene su punto especial. Maria, al igual que los chirigoteros ‘afectados’ por la catástrofe de Chernobyl, no tiene mano izquierda. Es manca. Y en lugar de enfadarse por esta broma, se lo ha tomado con muchísimo humor. Tanto que se ha puesto a bailar.
Esa reacción ha provocado el aplauso unánime de la red social. Uno de ellos del propio autor, Antonio Serrano, que quiere conocerla porque “nos ha dado una auténtica lección”. Javi Tinoco, autor de Los Molina. Miguel Ángel García Argüez ‘el Chapa’, el cuartetero Ángel Gago, Kike Remolino, Rafa ‘Taleguilla’, Faly Figuier, Antonio ‘Piru’… todos se han dirigido a ella con cariñosas y emotivas palabras.
Algo que ha sorprendido a la propia chica. “No me esperaba esto para nada… Hasta me han seguido algunos de ellos y yo no quepo en mí de la emoción…”, comenta sorprendida. Es una más de las andaluzas de fuera de Cádiz (en este caso Huelva) que mueren por el Carnaval y por la ciudad. Y que nunca ha podido estar en el Gran Teatro Falla.
“Cuando lo escuché, lo primero fue reírme y comentarlo en Twitter… Puse que me encantaba la cuarteta y que me harté de reír… Por la noche me dormí pensando que tenía que grabar un vídeo bailando esa parte por que me representaba mucho”, recuerda de la noche del domingo.
Pero ¿por qué unos se enfadan y otros ríen con un mismo chiste? Habla en primera persona. “Por una sencilla razón… He pasado muchísimo tiempo de mi vida llorando y preocupándome por mi condición y cuando empecé a ver que reírse de uno mismo era lo más normal, empecé a practicarlo y ahora me doy cuenta que todo ese tiempo que pasamos preocupándonos por lo que dicen de nosotros, es tiempo perdido”.
Respeta pero no entiende que haya quien se mosquee. Principalmente porque todos nos reímos alguna vez de otro al que le puede ofender esa misma risa. “Hay mucha gente a la que le duele lo suyo… Pero aún así se ríen de los demás… Entonces, como dijo la chirigota “Pídeme lo que tú quieras”, ¿por qué lo mío si hace gracia y lo tuyo no?”. Hace referencia al pasodoble en el que el propio José Antonio Molina hacía chistes sobre el muñón de su brazo izquierdo. O nos reímos todos o aquí no se ríe nadie.
Las palabras de María hacia este rostro tan conocido del Carnaval son un ejemplo de cómo pequeños gestos pueden cambiar el mundo. Al Molina “en parte lo he tomado como referencia a cómo se toma las cosas y saca partido de lo que le pasa. Me transmite esa seguridad y esa gracia que yo necesitaba”.