Eduardo Bablé: «Ojalá pudiera seguir presentando este concurso toda mi vida»

Una enfermedad le impidió realizar su tradicional labor en 2016

Por  21:01 h.
Eduardo Bablé: «Ojalá pudiera seguir presentando este concurso toda mi vida»

Un repentino desprendimiento de retina dos días antes del comienzo del COAC 2016 lo apartó de la labor que magistralmente viene realizando como presentador de sala en el Gran Teatro Falla. Eduardo Bablé, cuya voz inconfundible volvió a dar paso a las agrupaciones en la noche del pasado domingo, no encajó aquello muy bien: “Lo pasé muy mal. Parece que todo vino de un sobreesfuerzo que realicé en diciembre y no dio la cara hasta enero. Me dolió mucho perderme el concurso, es algo que vivo muy intensamente. Además, después de tantos meses de ensayo tampoco pude tocar con mi coro La Corte. Fue duro”.

Pero la operación no le impidió “disfrutar” a su manera del concurso: “Lo viví bocabajo, apenas pude ver nada, viví el carnaval de una manera puramente auditiva. Aquello me retrotrajo a mi infancia, cuando seguía el certamen por la radio y trataba de representarme lo que los locutores describían”.

Ahora, completamente recuperado, afronta el concurso “con ganas e ilusión. A pesar del paréntesis de dos años, cuando empecé a hablar el domingo tenía la sensación de que nunca había faltado”.

Su aparente tranquilidad y su prestancia sobre las tablas no deja entrever lo que va por dentro. A pesar de su veteranía, confiesa que siente “nervios, nervio escénico, que no miedo. Eso nunca se pierde ni se debe perder. Llevo en los escenarios desde los cuatro años, pero la responsabilidad de responder a las expectativas siempre le produce a uno esa tensión que yo considero positiva para hacer mejor el trabajo”.

Como gran aficionado al carnaval, reconoce que el suyo “es un trabajo envidiable: poder disfrutar de todas las agrupaciones, sin importarme la mayor o menor calidad de cada una. Ese crear cada año algo nuevo y mostrarlo al público es lo que me pone la carne de gallina”.  

 

Poco antes de regresar rápidamente a bambalinas para contarnos quién actuará a continuación, es fácil percibir en sus ojos la emoción cuando sentencia que “es un gran honor y orgullo presentar este concurso. Ojalá pudiera seguir toda mi vida haciéndolo”. Por muchos años, Eduardo, bienvenido de nuevo a tu casa.