Sin límite

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Sin límite

Letra y música: Faly Pastrana Lorenzo y Carmen Jiménez Barea
Localidad: Cádiz
En 2014: Óyeme

Paso por preliminares:

San Benigno: Preciosa puesta en escena la de esta comparsa. Siempre es uno de sus fuertes, pero no el único, ni mucho menos. Vienen a traer un nuevo amanecer para que despiertes invencible. Son el universo, quieren darle luz a la tierra. Vamos sin límite, que tienes el mundo en tus manos. Muy concentradas comienzan el primer pasodoble. Quién iba a decirme compañera que ibas a ser capaz de condenarme. En España vale más tu palabra de fulana que la palabra y el corazón de un millón de hombres. Convenciste al juez y me han quitado a mis hijos. Quién maltrata a quién con las leyes de su lado. Te ríes de las que pasan miedo de verdad. Paradójicamente se meten en la piel de un hombre para contar esta historia. En el segundo pasodoble le cantan a la comparsa de Sevilla. Entiendo que se barra ‘pa’ casita. Entiendo que no haya para ellos más allá que su Giralda y su Macarena. Puedo tolerar el chovinismo, pero que no olviden que somos cuna de la libertad, la que tiene el pueblo para expresarse. No entiendo que se quiera hundir por esto a toda Sevilla, con tanta gente enamorada de la playa y la sal de mi Tacita. Ya está bien de estúpidos rencores, de tanta enemistad. Viva Sevilla, cómo no, viva ‘Cai’, le pese a quien le pese. A fin de cuenta los dos tenemos un corazón con la misma sangre blanca y verde. Y las luces de las bolas del mundo son justo así, blancas y verdes. Buen detalle y gran capacidad de reacción. En el primer cuplé le tiran los tejos a Enrique Miranda y en el segundo no duermen porque se les aparece el payaso de ‘El circo de la vida’. A mí me pasa igual. Bien, pero aún deben ir a más.

El Maligno: Los globos terráqueos serían una lamparita linda para mi mesita de noche. Es increíble que esta comparsa, abanderada de la mujer en el Concurso en los últimos años, con tantas cosas como hay para cantar desde a óptica femenina, defienda un pasodoble desde la perspectiva del hombre. Una oportunidad perdida (y muy poca vista del autor).

Puntuación:**

ANTONIO MUÑOZ DE LA VEGA