La comparsa de Córdoba

Por  0:00 h.
La comparsa de Córdoba

Autor letra José Manuel Aranda y Miguel Amate
Autor música J.M. Aranda y Rafael Castro
Localidad Córdoba
En 2011 Los molto contenti

PASO POR PRELIMINARES

Puntuación: ***

Si hubiera un premio al buen gusto, pocos podrían arrebatárselo a la Comparsa de Córdoba. Homenajeando a Rafael Castro, pionero comparsista cordobés de los sesenta, se presentan como los viejecitos componentes de aquellas agrupaciones. Pasodobles que suenan a otra época. Con la elegancia que les caracteriza, obvian la polémica descalificación del año pasado y vienen a demostrar a Cádiz su eterno respeto. Acertada también la segunda letra, a Andalucía. Muy simpáticos los cuplés, al apocalipsis y las bolsitas de pago. Gran parte del público los despidió en pie. // Vicente González

PASO POR CUARTOS DE FINAL

Puntuación:***

Dejaron a un lado la elegancia que les caracteriza para meterse en terrenos pantanosos en el primer pasodoble. En un ataque al Patronato, censuraron la descalificación de buenas agrupaciones como la comparsa de Ronda mientras se permite participar a cuartetos de nula calidad como el de Badajoz o el de «los cuatro mojones». No parecía necesario tirar por tierra a compañeros para criticar el reglamento ni meter en el mismo saco lo que vino de Badajoz y el cuarteto gaditano. En el segundo pasodoble, en poco menos de un minuto de música de dulce, mandan un saludo a un gaditano en Castellón. Muy simpáticos los cuplés en contenido e interpretación. En el primero volvieron a tratar de pasada el asunto de la descalificación de la comparsa el pasado año. Dicen que no se apuntaron al concurso de baile de l hogar del pensionista por si las moscas. El segundo, gracioso aunque ya oído, a la muerte de Fraga, que va a resultar que al final lo de Palomares ha dado la cara. Mantuvieron el buen nivel mostrado en preliminares. // Vicente González

PASO POR SEMIFINALES

Puntuación: **

Los cordobeses regresaron con su prodigiosa interpretación y sus musiquillas de ensueño, pero se quedaron algo cortos en el apartado literario. En el primer pasodoble, reconocieron que no reniegan de su tierra de origen, aunque mueren en febrero por no haber nacido aquí. Luego alentaron a los poetas a no abandonar la tradición por dinero y premios volviendo a escribir a la luna, a las rosas y a las caracolas. «Que a la piconera tenga que venir un viejo a echarle un piropo, qué pena por Dios». Cuplés simpaticones y, sobre todo, bien defendidos, a una letrilla que se les pierde en el bolsillo y al programa de Juan Imedio. Agradables. // Vicente González