aunque bien es cierto que más por su llamativa puesta en escena que por
el repertorio, cortito, que han ofrecido esta noche.
“Nosotros no ensayamos en lavaeros”, primer pasodoble dedicado a contar las condiciones en las que han preparado la chirigota. Se nota que es una letra de relleno, más bien descafeinada. Mejor en cambio el segundo, con un tono muy crítico para todas las partes implicadas en la organización del Concurso, sobre todo por la vertiente de la venta de entradas: “por eso protesto, porque al final vais a conseguir cargaros esto”.
También los cuplés han sido de un nivel muy diferente; el primero, dedicado a hacer un repaso por otras agrupaciones, para terminar con una ironía sobre el forillo de la comparsa de Martín. El segundo, subidito de tono pero con mucha gracia, sobre un marido que llega a casa diciéndole a la mujer “quítate la bata y ponte las bragas, que he traído nata y chocolate…” ya se pueden imaginar por dónde van los tiros.
Flojito el popurrit, donde más se nota lo limitadito de las voces y con bromas más previsibles.
En cualquier caso, esta chirigota ha cumplido con creces con su intención de pasar un buen rato y hacérselo pasar al público, al que han arrancado varias ovaciones y muchas risas, con la anarquía que caracteriza a las agrupaciones de Cascana.
Difícil van a tener repetir presencia, aunque a buen seguro que van a seguir haciendo reír, si no en el Falla, por las esquinas y tablaos.