Seisdedos, nos acordaremos de ti como nos acordamos ahora
Siempre hay motivos para la esperanza, para la celebración de la fortuna que gozamos. No hay motivos de congoja ni pesar. Déjate de lamentos y lloriqueos. Por si tenías alguna duda, ahí tienes un motivo para creer en la alegría: Joaquín Seisdedos deja su función activa en la grúa municipal en cuestión de semanas.
Que llueva ahora es motivo de alegría y satisfacción
Y lo limpito que se queda el aire. Que desaparecen todos los virus que amenazan las cristalinas cuerdas vocales de nuestros mejores ortavillitas. Que llueva, que llueva, la Virgen de la Cueva (de María Moco). Que llueva ahora, que estamos bajo techo, todo lo que llovió el año pasado en la semana de calle.
El Carnaval sirve para usar terrenos baldíos
Luego dicen que todo esto no crea riqueza y bienestar. Más de diez años sin saber qué hacer con el entorno de la Plaza de Sevilla y la estación de Renfe cuando llega el Carnaval y lo pone todo en su sitio. La carpa remozará, renovará, ensalzará ese páramo de jaramagos junto a Renfe. ¡Carnaval dinamizador!
Todos ayudan a todos en un mundo muy solidario
Valdés ayuda a un cuarteto juvenil. Vera a un coro de adultos. Yuyu hace cuplés de tapadillo. Rivero, como otro ciento, se vuelca en festivales benéficos. Quico Zamora hace de figurante con el coro de Sevilla y Pardo con el de Tey. ¿Chusma insolidaria? Con una libreta había que mandar a unos cuantos al Falla.