Más ‘molondritas’

Salvo excepciones, las mujeres siguen sin participar y, sobre todo, sin dar muestras de que quieren cambiar su papel

Por  7:29 h.

Cuánto se ha hablado de la representación de la mujer en el Concurso de Agrupaciones del Carnaval de Cádiz en estos meses. Cuánto se ha teorizado y cuántas lecciones hemos recibido a diario sobre un asunto que sigue sin encontrar solución. Personalmente, comparto la eliminación de una figura tan anácronica como la de las ninfas y la Diosa, pero seríamos muy ingenuos si pensamos que anulando este palco de protocolo hemos hecho un Carnaval más igualitario. Solo hay que ver y escuchar a cada una de las agrupaciones que pisan las tablas cada noche. Sin firmas, sin presencia y sin temas que conciernen a la mujer. Salvo excepciones, seguimos sin participar y, sobre todo, seguimos sin dar muestras de que queremos cambiar nuestro papel. Compañeras, no nos olvidemos que seguimos estando en los palcos. No vestimos de piconera ni llevamos madroñera pero, lamentablemente, seguimos teniendo un papel secundario en ésta, nuestra fiesta. Hasta que no hagamos nuestras propias músicas y letras, hasta que no cantemos nuestras coplas, hasta que no nos disfracemos, todas las acciones y teorías sobre la igualdad habrán caído en saco roto. 

Cuando echo la vista atrás, siento envidia sana por lo que consiguieron aquellas ‘Molondritas’. Isabel Payán , Ángeles Castaño, Concepción Domínguez, María Espejo, Carmen Garay, Carmen García, Teresa Gavira, Manoli de la Jara Suárez, Soledad Molero Romero, Antonia Nieto, Ramona Sánchez, Rosario Segura y Rosario Mateos González. Ellas fueron las primeras mujeres en pisar las tablas del Gran Teatro Falla, precisamente en una época en la que dar este paso era mucho más difícil que hoy en día. Estas heroínas dieron la mejor lección de igualdad que se ha dado en los últimos 30 años. Ellas deben ser el espejo en el que mirarnos. Ellas nos dieron la mejor lección.