Hace años, cuando José Antonio Valdivia era presidente de la Asociación de Autores, como uno de los siete patronos de la Fundación 1884 Casa-Museo del Carnaval, se comenzó una labor de recopilación de documentos y materiales para los fondos de la institución. Hoy día, esa labor se sigue realizando. En el Callejón del Tinte, en la Escuela de Oficios y Artes Aplicadas la Fundación tiene su oficina.
En los últimos meses los avances de dicha Fundación se han visto ralentizados. Lejos de las continuas luchas entre tirios y troyanos, que duda cabe que la actual crisis tiene mucho que ver en todo esto. Por eso no comparto la opinión de muchos compañeros columnistas que últimamente usan la idea del Museo del Carnaval para ridiculizarlo y como ejemplo de entidad que nunca llegará a buen puerto. ‘Museo del Ná’ he leído por ahí…
Desde hace años se vienen inventariando y catalogando los fondos para que en un futuro no muy lejano, cuando se construya el continente que lo albergará, dicha institución ya cuente con una biblioteca y un archivo. Incluso ya se han culminado dos fases de digitalización de documentos referentes al Carnaval del Archivo Histórico Municipal. Dicho trabajo se encuentra ahora mismo en su tercera fase, aquella que comprende documentos que van desde 1968 hasta prácticamente nuestros días.
La Fundación está abierta a recibir donaciones de entidades públicas, privadas, de ciudadanos anónimos… Demos ejemplo de amor propio hacia nuestra cultura y hagamos todo lo posible para que, dentro de nuestras limitaciones, el Museo sea una realidad más pronto que tarde. Qué no digan las generaciones futuras que nos quedamos de brazos cruzados.