CARNAVAL DE CÁDIZ 2020

¡No me pises lo fregao!

Por  8:00 h.

Nuestra querida fiesta ha recibido un zarpazo que tardará en cicatrizar. Como un animal herido, nuestro concurso está buscando un lugar donde cobijarse. Un entorno que le resulte familiar. Necesita sentirse en casa.

 

El carnaval de Cádiz no nació ayer. Es el resultado de muchas batallas. De un sentimiento que acabó pariendo una fiesta. La fiesta de las pasiones.  La pasión no es un negocio. No es un producto. La pasión es un bien no renovable. No a corto plazo.

Hemos consumido demasiado. Hemos abierto demasiados agujeros en el saco de las esencias y ahora hay que volver a llenarlo.

El carnaval es la suma de varios ingredientes; amor, rabia, poesía, sarcasmo, ironía, su mijita de bastinazo, un buen chorreón de poca vergüenza pero sobretodo, tiene como base el gaditanismo. El gaditanismo, para florecer, necesita unas condiciones muy peculiares. Muy nuestras. Todo lo no sea de aquí lo corrompe, lo adultera y lo desnaturaliza

Si de verdad amas esta fiesta, tienes que dejarlo crecer. Tienes que dejarnos reconstruir nuestro invernadero de plata y sal para que esto se regenere. Con nuestra humedad, nuestro levante, nuestro humor y nuestra forma de equivocarnos. Sino lo hacemos así, el Carnaval será otra cosa. Pero no Carnaval de Cádiz. No lo que ahora te apasiona. Si coges un fruto antes de que madure, no lo disfrutas. Si sacas del fuego el puchero antes de tiempo, no es un puchero en condiciones. Pues igual. Si no nos dejas recuperar la esencia del carnaval que hemos “mamao” ese carnaval desaparecerá y ambos perderemos.

 

Soy el primero que ha defendido que las puertas de nuestra fiesta tienen que estar abiertas. Pero hasta tu madre o tu padre te riñen si pisas lo fregao. Esto es igual, estamos de reformas. Lo único que queremos es que esto no se pierda. Que nuestro consumo del mismo no sea mas rápido que su regeneración. Lo único que buscamos es la vida eterna de los carnavales.