Se levanta el telón de los sueños, se maquillan los corazones, comienza a sentirse la magia, las guitarras esperan que llegue su momento, los bombos sacuden sus latidos divinos, la caja repiquetea llamando al compás y los pitos anuncian la felicidad.
Ya ha llegado el momento, ese momento que todos esperamos cada año, ese instante en el que el alma nos dibuja serpentinas en el estómago en forma de nervios, de impaciencia, de locura incontrolada.
Qué bonito es esperar cuando se sabe lo que se espera, qué bonito es ensayar la sonrisa de un cuplé o imaginar el pellizco de un tango, qué bonito es cerrar los ojos y paladear los días, las horas, los minutos y los segundos que nos separan del inicio de un nuevo carnaval.
El concurso abre sus puertas y tan solo reserva el derecho de admisión a quienes no estén dispuestos a estremecerse, a quienes no sepan emocionarse, a quienes no sepan reír, a quienes no respeten lo bueno, a quienes no valoren el ingenio.
El cielo se abre una vez más para tocar la gloria, la del 3×4, la que amasaron el Tío de la Tiza, Cañamaque, Quirós, Paco Alba, Juan Poce, Fletilla, el Carota, el chimenea, Pedro Romero, Enrique Villegas, Manolo Santander o Juan Carlos Aragón.
Ellos nos marcaron el rumbo y nuestra pasión ha eliminado los peajes del camino.
Llega la época más esperada del año por la que a veces vale la pena vivir el año entero, llegan las noches de radio y las manañas de periódico. Llegan las crónicas y las coplas, los fríos y escalofríos, los puntos y los tipos, por fin llega todo eso que esperamos.
Bendito seas carnaval, Rey de la tierra del sur, amante callado de nuestras emociones, compañero fiel de nuestros días.
Arranca un nuevo COAC, la respiración se entrecorta, el pulso se eleva y la mirada se pierde; ha llegado el momento, por fin ha llegado… sepamos disfrutar la copla, el trabajo y la ilusión, abracemos lo nuevo, valoremos lo sencillo, aplaudamos lo difícil, riamos y sonriamos, disfracemos nuestra alegría con plumeros de ilusión, digamos al mundo que somos gaditanos y que esta es la fiesta a la que tanto queremos… ha llegado el carnaval, ¡seamos felices!