El Carnaval de Cádiz en el Falla.
Carnaval de Cádiz en el Falla.

Carnaval de Cádiz 2019

Cádiz, tesquiero y ya está

Cádiz me entró por los ojos, la nariz, la boca y hasta las orejas.

Por  7:00 h.

Tardas muy poco en acostumbrarte a la incomprensión a 650 km ¿Pero y eso te gusta, si tú no eres de Cádiz? Igual llevan razón, igual lo raro soy yo porque no sabría explicar por qué; Solo se que un día de agosto de 2003 llegué y no he conseguido salir. Y quizá nunca salga porque quizá nunca quiera salir de aquí. Que en mi caso es allí y eso lo complica todo. Pues sí que empiezo bien…

 

Presentarme es absurdo, no me van a conocer, pero arrancar sin pedir perdón no es lo que tengo previsto. De hecho, cuando los insensatos que manejan esta cabecera me llamaron para escribir “¿Yo? ¿De Carnaval?” lo primero que pensé fue en titular Perdóname, Cádiz. Aunque al rato caí, perdóname de qué, si el dineral que voy a recibir por estas lineas me lo voy a gastar en tus tascas.

 

Decía que debí llegar a Cádiz (para un madrileño Conil era Cadiz qué más da) los primeros días de un mes de agosto hará algo más de 15 años. Por probar un sitio nuevo hijo, que siempre vamos a Benidorm y a mi ya me aburre. Maldita la hora. Creí haber salido ileso quince días después cuando metimos las maletas en el coche para dejar aquel apartamento de la Calle Antonio Piné; nada más lejos de la realidad. Cádiz me entró por los ojos, la nariz, la boca y hasta las orejas. Y dale, que Conil no es Cádiz. Había que volver y se volvió un verano más tarde. Y al otro. Y aquí seguimos. Porque este piso de Móstoles suena a Cádiz.

 

En las drogas me introdujo mi amigo Miguel (GRACIAS), que en las redes se hace llamar Lolaso y tiene exitazo, dice. Miguel, que igual te grababa un programa deportivo de radio nocturna que te pasaba al messenger un enlace pirata para ver Perdidos, me envió al hotmail una chirigota. Lo que diga mi mujer. Pues muy bien. Resultó que en ese enlace, había una especie de resumen en el que no se hacía distinción entre un coro de Julio Pardo, una Chirigota de El Selu o La Quintaesencia de Martín. Yo escuchaba pero me quedaba con los del bigotón con las bolsas de la compra. No salí de la habitación y ya era uno más de ellos. Mis amigos van a hacer un arró en el campo, qué gracia me hizo aquello. Ya van entendiendo por qué pido perdón…

¿Martinez qué? ¿El Love? Nunca podré dar las suficientes gracias a Internet. Contigo empezó todo, diría Gerard. En cuatro días ya era un Araka más, de Tino, de esos años del Canijo, de Selu (de Selu se nace aunque te des cuenta a los 30) y de alguno más que iba escuchando. No se el día ni la hora en la que el Carnaval se apoderó de mi y lo que al principio era escuchar de vez en cuando se convirtió en rutina y no había día que no me picara la curiosidad por conocer algo de otros años. No había manera de ir de un vídeo a otro sin que el Youtube Bendito me recomendara Con permiso buenas tardes o Un amigo es un amigo… Sin comerlo ni beberlo ya le estaba reclamando a Don Antonio que volviese. Pero este tío quien se cree para no cantarle a Cadiz. Increíble.

 

Es difícil ir aprendiendo sin referentes a los que agarrarte, por pura intuición. Aunque una vez más hice bueno eso que dicen de que “hay que ser muy gilipollas para no saber apreciar lo bueno”. No tardé en pasarme a la Comparsa, no porque fuera lo bueno, porque me llegaba más. No se explicarlo tampoco. Ni me pregunten por afinación, por lo bien cantao ni por lo metido que iba un repertorio en el tipo… Eso hay que mamarlo y yo en Madrid mamaba lo que me dejaban ¿En qué punto se convierte uno en un jartible? Yo, que na’ más que creía en Camarón y Paco, y algo de Manolo García… Aquí me veo, con otro Manolo más viñero con apellido del Norte.

 

Me van a perdonar también que en estas letras y las que vengan, cojee sutilmente hacia El Rubio o El Cabeza o como le de por auto proclamarse de aquí a unos años (lo que tenemos que aguantarle…). Reconozco que en esa ausencia de viento que tardó 13 años en soplar, recortó tanto terreno a Martinez Ares que ahora no hay manera de sacarle de ahí ¿Qué manera de escribir tiene ese tío? Si no he sido capaz de explicar lo otro, voy a explicar a Juan Carlos…

 

Vendrán días para hablar de mis gustos, de cómo Eras tan guapa y tan niña o Me han dicho a mi tus vecinas han marcado mi vida. No miento, han marcado mi vida. Como la mía la de muchos gaditanos de adopción que en nuestras habitaciones un día empezamos con un vídeo suelto y los pocos años ya estábamos con Manzorro, mis compañeros Rubén o Jose Juan en la oreja y Quique y Miriam en la tele. Aprendiendo cada día, porque yo aquí he venido a escuchar, a respetar a todos los autores y a valorar el esfuerzo que supone salir en Carnaval. Que sí, que el Carnaval no es solo el Concurso. No se esfuercen en encerrarlo en sus murallas, hace años que las desbordó. Prometo cuidarlo aquí en Madrid, no banalizar su expansión. Darlo a conocer con responsabilidad qué digo, con miedo para que no caiga en manos desagradecidas.

Me quedan 5 días para debutar en el Falla.

 

Salud, gaditanes!