
Con sillas, plásticos para combatir la lluvia, termos de café y mantas, muchas mantas. Así han esperado decenas de gaditanos hasta 67 horas para conseguir una entrada para las funciones de cuartos y semifinales que han salido a la venta esta mañana. Una espera dura que se inició en la tarde del viernes con los primeros ocupantes y que se alargó durante dos días de intenso frío y viento en la plaza Fragela. Para muchos de los que se intentaron refugiar junto a la pared del Falla fue una auténtica prueba de resistencia. «Sabemos que estamos locos, lo reconocemos, pero estamos aquí porque queremos asegurarnos una entrada», contaba María enfundada en un gran abrigo. María llevaba desde la tarde del viernes en uno de los primeros puestos de la cola. «Llevaba un par de días pensándolo y cuando vi a los primeros me vine enseguida». Junto a ella, José con la voz ya ronca y las manos en los bolsillos, intentaba entrar en calor con algún que otro salto. «Hay gente que dirá que no es normal lo que hacemos pero algunos esperan las mismas colas por David Bisbal y nosotros por conseguir una entrada para el Falla». No esperaban por una agrupación en concreto, «los que llevamos aquí tanto tiempo es porque venimos a comprar las tres semifinales y así ver lo mejor de concurso», apuntaba.
En la tarde de ayer reconocía que la noche del sábado había sido dura, «hemos pasado mucho frío porque no había manera de entrar en calor». Ayer el viento cambió por la lluvia «por lo que seguimos pasándolo igual de mal». De ahí que negaran tajantemente la posibilidad de revenderlas después, «no aguantamos todo esto por una reventa, no merece la pena».
Para acelerar el paso del tiempo, la mayor ayuda era la imaginación. «Íbamos a traer las cartas pero con este viento tendrían que ser de acero», bromeaba Sergio. «Lo malo comienza cuando acaba la sesión del Falla. Mientras tanto te distraes con el ir y venir de agrupaciones y los pasacalles pero a partir de las dos, por aquí ya no pasa nadie».
A medida que avanzaban las horas, el número de aficionados iba aumentando. Ayer tarde circulaba por las redes sociales numerosas fotos y comentarios sobre las colas del Falla que ya bloqueaban las salidas de emergencias del teatro y dificultaban la labor de los camiones con el atrezzo del grupo. Algunos intentaban hacer presión para que las entradas salieran antes a la venta ante el elevado número de congregados «pero nos han dicho que no hay nada que hacer». En la cola, se alzaban algunas quejas con la organización y el procedimiento de la venta de entradas «pero el que algo quiere algo le cuesta».