Reconózcalo. Es usted uno de esos gaditanos que en plena crisis de los cuarenta, consciente de que nunca ha sido –ni será, ya- gracioso, ha terminado por confesar aunque de manera íntima y sólo ante un grupo muy reducido de amigos, que no le gusta el Carnaval. Que nunca tuvo intención de disfrazarse, que si alguna vez lo hizo fue por no ser un patoso, que ni siente los pellizcos del mes de febrero, ni se emociona con un tango –ni siquiera en tierra extraña-, que no se acuerda del popurrí de los Carreros, ni sabe cómo demonios se llama la chirigota del Love este año. Sabe, eso sí, quién es el pregonero, pero lo sabe porque aún tiene un punto de vergüenza torera y no quiere que le ocurra lo de todos los años que terminan por llamarle soriano –y no precisamente por los almacenes- en el trabajo. Y sabe que anteanoche empezó el concurso porque su vecino puso Onda Cádiz a todo volumen y no le dejó enterarse de cómo iba la nariz de Belén Esteban.
Reconózcalo. Ya ha mirado en vueling algún vuelo barato para salir pitando el primer fin de semana de Carnaval –no tiene edad, ya, ni ganas para un camping en Grazalema- y anda buscando excusas para no quedar con esos amigos pesados que aún siguen yendo a la Viña entresemana con la misma devoción con la que otros se van al Rocío.
Reconózcalo. No sólo de Carnaval vive el hombre. No es usted un bicho raro. Aunque lo parezca. No hace falta que disimule más leyendo la prensa y opinando del concurso como si hubiera pasado la tarde pegado al transistor. Dígalo en voz alta y clara. Una sola vez, «no soporto el Carnaval». Notará los efectos enseguida. No se preocupe si le hacen el vacío, si hablan de usted a sus espaldas o si le compadecen, porque conseguirá que nadie le torture con ese cuplé tan bueno de anoche o con el pelotazo de este año. Será como el virus grastrointestinal, aunque un poco más largo. Pero después de un mes, los mismos que hoy pierden pie con un tres por cuatro, perderán la cabeza por un besamanos. Y eso sí que es preocupante.
Manual para sobrevivir
Por Yolanda Vallejo , 0:00 h.