La lluvia da una tregua a los tangos para despedir un Carnaval pasado por agua

Los coros y las ilegales aprovecharon el buen tiempo para cantar sus últimas coplas a los aficionados que se lanzaron a las calles

Por  11:58 h.

Los pronósticos meteorológicos fallaron y las coplas no
tardaron en salir de la inactividad forzosa en la que han permanecido
gran parte de la semana a causa de las constantes lluvias. Desde antes
del mediodía, los coros y las agrupaciones -legales e ilegales- se
dejaron ver por las calles de la ciudad para despedir a lo grande uno
de los carnavales más lluviosos de la historia. El casco histórico
volvió a llenarse de público, aunque algo menos que cualquier otro
domingo de Piñata. Sin embargo, hasta la capital se desplazaron cientos
de seguidores procedentes de diferentes localidades andaluzas. En la
carretera de Astilleros se podían contabilizar hasta trece autobuses
aparcados que habían llegado a Cádiz en excursión para disfrutar de la
fiesta.

Entre las agrupaciones del concurso, estuvieron en las
calles, las chirigotas de Los naturales, Los Famosos, El submarino
amarillo o Los falsos, que hicieron su primera parada en la calle Ancha
ante la demanda del respetable. En esta misma zona, los integrantes del
grupo del Lobe se encontraron con El Selu, el pregonero de esta
edición, que aprovechó la jornada para descansar, aunque tuvo que
fotografiarse con decenas de aficionados que lo paraban para
inmortalizar el momento.

Los romanceros

La presencia de ilegales y romanceros también se
multiplicó con la salida de sol y volvieron a ocupar los callejones y
esquinas de gran parte de las calles del centro. En la plaza de las
Flores hicieron las delicias del público los chirigoteros de Escuela de
hortelería, que incluso hicieron mover el esqueleto a las personas que
presenciaban la actuación con una divertida rumba.

Las exultantes Novias arrepentidas también entonaron su
cuidado repertorio en Javier de Burgos en el comienzo de su ruta
callejera. A escasos metros otras como Los del Frak o Las mamachicho
con cara de bicho también hicieron lo propio para meterse al público en
el bolsillo con sus letras gamberras.

Los coros siguieron sus tradicionales itinerarios y se
repartieron por las diferentes vías haciendo sonar sus tangos. Un
pequeño contratiempo tuvo La Academia cuando su batea pinchó a su paso
por la plaza de Candelaria. Los componentes de la agrupación tuvieron
que bajarse y esperar la llegada de la rueda de repuesto para poder
emprender una marcha que se prolongó más allá de las siete de la tarde.
A partir de esta hora, el casco histórico de la ciudad fue más ilegal
que nunca y las agrupaciones callejeras se convirtieron, una vez más,
en las verdaderas protagonistas del domingo de Piñata. La mayoría de
los grupos se trasladaron hasta el barrio de La Viña para despedir,
como es tradicional, en las calles y plazas con nombres de reconocidos
autores del Carnaval, la fiesta grande de la ciudad hasta el próximo
año.Este fin de fiesta tuvo su broche de oro con la quema de la Bruja
Piti en la playa de La Caleta, donde se congregaron numerosas personas
para decir el adiós definitivo a la celebración. Sin embargo, no
pudieron disfrutar de la sesión de fuegos artificiales, ya que el
Ayuntamiento decidió lanzarlos el sábado, durante la celebración de los
conciertos, al anunciar el Aemet probabilidad alta de lluvias para el
día de ayer.

Los más ‘jartibles’, organizaron su particular despedida
con algún que otro bailecito en la carpa municipal, aunque muchos de
ellos volverán a salir a la calle el próximo fin de semana.

Los más pequeños también pudieron disfrazarse y
disfrutar con las actividades y la fiesta infantil que tuvo lugar en la
plaza de San Antonio desde primera hora de la mañana. Los niños
participaron allí en talleres de maquillaje y globoflexia, de disfraces
y también pudieron jugar en el parque infantil con atracciones que se
habilitó para la ocasión. Asimismo, también se pudo ver una divertida
exhibición de zancos. La fiesta continuó a partir de las cuatro de la
tarde con una gran celebración sobre el escenario situado en la
céntrica plaza.