Juzgen ustede. Presentación: Aquí nos presentamo Los detestive/ vamos con una lupa y con gabardina/ y con la de tres cuartos fino La Ina./ Como somos privaos/ nos gusta el prive/ y aquel que está en la esquina/ también los pibe./ Como ven el tipo es un tipazo/ y nos hace juego con el morazo…/ Este que toca el bombo/ es un pesao/ y le llaman Colombo/ por despistao./ Al del chupachú/ se laío la olla/ y como es calvorota/ se cree Koya…/ y no veas que polla/ que tiene el nota./ El que está a la caja se hace…. «¡Para! ¡para! ¡para! ¡para…!»
Mira, se vino pa mi el nota, el Juancarlo ese, que parecía que le había faltao, endiosao que está, quillo, por mi mare que está endiosao, ese sa creío que es el Veneno. Y va y me dice, «Bizco, eso es mu clásico… ¿no, pisha? Eso lo hace tol mundo, hasta las agrupaciones juveniles, y lo que estamos buscando es más innovador. No se puede sé tan previsible, Colombo/ bombo, Koya/ polla, caja/ paja… (joé, esa es buena, se me había ío, eso no era lo que yo tenía, pero me lo apunto. Saqué la libreta y se mosqueó) …Qué haces, que te estoy hablando (este sa creío que es mi mujé), que no se puede ir a la rima fasi, pisha», «Vale, pero déjame que quiero apuntá una cosa» (sus castas toas, apunté lo de la paja pero no me dejó ni guardá la libreta, qué impaciencia el menda). «Lo que te quiero desí es que hay que buscar fastores nuevos, transformar lo establesío, como el Aragón» (po también tengo una rima fasi pal Aragón, y si quieres pa Quiñónes tengo otra, y pa to el que te de la gana… Será sieso el tío). Le digo, «Si no ma dejao terminá, ¿dónde has visto tú ahí una paja?, entérate, yo no escribo esas guarrerías, ahí lo que decía es El que está a la caja se hace maneras/ y en vez del caja es la cajera», y dise el tío, «Po peó me lo pones, que parese que somos tos maricones (fíjate, y está criticando la rima fasi. Al que escupe parriba le cae en la cara…) pa eso fuéramos escogío Los Mari con sones», «…Po no sé yo que decirte si hubiera sío mejó». Mira, me miró perdonándome la vida. Aquí tol que hase dos letrillas se cree que es Beque. «Bueno, bizco, po tú déjame a mí la presentación y te hases unos estribillitos, ¿vale, pisha?», «Po vale».
Me fui pal Torre y se lo dije, «Cusha, Torre, este quiere hacerme una gallardonada». Se estremeció el hombre, oye «Bizco, cuanto lo siento, quillo, de verdá… eso está mu feo… eso no se hace… ¿eso qué carajo es…?», «Que este cuando se haga el libreto no me va a queré poné de segundo letrista, al tiempo», «Joé, había pensao que era algo malo…
Yo no es por ná, bizco, pero se lo está currando. Y te voy desí una cosa, hasta fuera de estas cuatro paredes hescuchao yo que tu eres mas flojo quel humo paja», «¿Quel humo paja? será que un muelle guita», «No, no, quel humo paja», «Po entonse eso es cosa del Juancarlo, quillo, está obsesionao con las pajas, ese con to lo innovador que se la da es un pajillero… ¿Con qué gente te juntas tú, Torre?», «Pisha, po contigo, por ejemplo». Qué mamón el Torre, me desmontó la crítica al pajillero con un golpe seco… Que pensándolo bien, tres mil años de historia, que serán más, porque eso lo llevo escuchando hase un montón de años, pero bueno, vamos a ponerle tres mil, la más antigua de occidente, la cuna de la libertad, la patria de Castelar, la de Salvochea, y vengo yo a conocer a un tío que es de un barrio que se llama Los Chinchorros…
La pregunta buena es ¿con qué clase de gente me junto yo?.
Pero bueno, no voy a dimitir ahora, esperaré a que pasen las elecciones.
Yo tengo un estatu y no voy a tirarlo así como así, le voy hasé un estribillo que se le van a caé dos lagrimones… Me cago en toas sus castas… humo paja, tequial carajo, Juancarlo.
Mira, se vino pa mi el nota, el Juancarlo ese, que parecía que le había faltao, endiosao que está, quillo, por mi mare que está endiosao, ese sa creío que es el Veneno. Y va y me dice, «Bizco, eso es mu clásico… ¿no, pisha? Eso lo hace tol mundo, hasta las agrupaciones juveniles, y lo que estamos buscando es más innovador. No se puede sé tan previsible, Colombo/ bombo, Koya/ polla, caja/ paja… (joé, esa es buena, se me había ío, eso no era lo que yo tenía, pero me lo apunto. Saqué la libreta y se mosqueó) …Qué haces, que te estoy hablando (este sa creío que es mi mujé), que no se puede ir a la rima fasi, pisha», «Vale, pero déjame que quiero apuntá una cosa» (sus castas toas, apunté lo de la paja pero no me dejó ni guardá la libreta, qué impaciencia el menda). «Lo que te quiero desí es que hay que buscar fastores nuevos, transformar lo establesío, como el Aragón» (po también tengo una rima fasi pal Aragón, y si quieres pa Quiñónes tengo otra, y pa to el que te de la gana… Será sieso el tío). Le digo, «Si no ma dejao terminá, ¿dónde has visto tú ahí una paja?, entérate, yo no escribo esas guarrerías, ahí lo que decía es El que está a la caja se hace maneras/ y en vez del caja es la cajera», y dise el tío, «Po peó me lo pones, que parese que somos tos maricones (fíjate, y está criticando la rima fasi. Al que escupe parriba le cae en la cara…) pa eso fuéramos escogío Los Mari con sones», «…Po no sé yo que decirte si hubiera sío mejó». Mira, me miró perdonándome la vida. Aquí tol que hase dos letrillas se cree que es Beque. «Bueno, bizco, po tú déjame a mí la presentación y te hases unos estribillitos, ¿vale, pisha?», «Po vale».
Me fui pal Torre y se lo dije, «Cusha, Torre, este quiere hacerme una gallardonada». Se estremeció el hombre, oye «Bizco, cuanto lo siento, quillo, de verdá… eso está mu feo… eso no se hace… ¿eso qué carajo es…?», «Que este cuando se haga el libreto no me va a queré poné de segundo letrista, al tiempo», «Joé, había pensao que era algo malo…
Yo no es por ná, bizco, pero se lo está currando. Y te voy desí una cosa, hasta fuera de estas cuatro paredes hescuchao yo que tu eres mas flojo quel humo paja», «¿Quel humo paja? será que un muelle guita», «No, no, quel humo paja», «Po entonse eso es cosa del Juancarlo, quillo, está obsesionao con las pajas, ese con to lo innovador que se la da es un pajillero… ¿Con qué gente te juntas tú, Torre?», «Pisha, po contigo, por ejemplo». Qué mamón el Torre, me desmontó la crítica al pajillero con un golpe seco… Que pensándolo bien, tres mil años de historia, que serán más, porque eso lo llevo escuchando hase un montón de años, pero bueno, vamos a ponerle tres mil, la más antigua de occidente, la cuna de la libertad, la patria de Castelar, la de Salvochea, y vengo yo a conocer a un tío que es de un barrio que se llama Los Chinchorros…
La pregunta buena es ¿con qué clase de gente me junto yo?.
Pero bueno, no voy a dimitir ahora, esperaré a que pasen las elecciones.
Yo tengo un estatu y no voy a tirarlo así como así, le voy hasé un estribillo que se le van a caé dos lagrimones… Me cago en toas sus castas… humo paja, tequial carajo, Juancarlo.