
Francisco Javier Cuevas Herencia ha traído con ‘Los culpables’ una comparsa muy gaditana, que le canta a Cádiz desde el principio y al final declarando su amor por esta ciudad y por el Carnaval. Pero no quiere que el aficionado piense que ha cambiado de opinión con respecto a lo que hizo hace dos años con ‘Los que barren pa casita’, que le dedicaron el repertorio entero a Sevilla. “No soy yo el que le canta a Cádiz, sino los pajeros. Es el tipo. El año que viene puedo traer un tipo diferente y cantarle a las Vascongadas. Pago 300 euros y montamos un grupo para poder cantar lo que nos dé la gana, y al que no le guste que se vaya al bar“, apunta el autor, cansado de que “se siga hablando de los barrenderos. Vamos a dejarlos en paz de una vez”.
Por eso, prefiere no hablar más si se sigue hablando del dichoso ‘temita’. Al final del popurrí, se vislumbra una ‘pseudodisculpa’ pero que sólo se ajusta al tipo. “No merezco este castigo por quererte como te quiero”. Cuevas se explica. “Con esto no pido perdón a nadie porque no hay nada por lo que pedir perdón. Estamos muy contentos con la actuación, porque lo hemos dado todo. Es lo que soñábamos, hacer una comparsa muy bonita, porque Cádiz se lo merece“. Una comparsa de Sevilla pero ‘gaditana’ pues “los que habñan son los pajeros. Todo el tiempo es haciendo alusión a ellos”.
El Gran Teatro Falla acogió a ‘Los culpables’ con total normalidad, sin reparar en la polémica de dos años atrás. “Nos han acogido como se debe acoger. El público de Cádiz no tiene rencillas”.