Luce una gran sonrisa en su enorme boca de Mil Llagas (el Mick Jagger gaditano). No es para menos. Su gira rocanrollera por el Falla ha sido todo un éxito y sus fans ya se los imaginan en la última gala. Con la chupa de cuero en el armario y ataviado con una discreta sudadera, el líder rockero con más ángel no paró de recibir felicitaciones. Es el precio de la fama.
–Vuelta al Carnaval, ¿vuelta a la guerra?
–Bueno, en cuartetos no hay tanta guerra, menos incluso que en la chirigota. También es porque somos muy pocos, y por eso nos llevamos bien. Yo por ejemplo tengo una muy buena relación con Morera.
–Las vueltas que da el Carnaval. Unas veces arriba, y otras abajo. Ahora se encuentra en su mejor momento.
–Que me dejen como estoy, con tres añitos seguidos en la final y un primer pase que ha gustado mucho. Da muchas vueltas. Y como tengas un año medio chungo, pues pa abajo del tirón.
–¿A veces no hay que darle demasiadas vueltas a la cabeza para entender sus chistes?
–Este año no tanto. Hemos cambiado el cuarteto histórico, y todo es más sencillo, más directo, para que no haya que masticarlo ni haga falta un folleto delante. Es cierto que otros años hemos sido algo rebuscados. El público es inteligente, pero esto va demasiado rápido y no llega igual.
–¿Cuándo vas a volver con la chirigota, con los amigos Figue y Bocu?
–No vuelvo porque soy muy malo para ensayar. Son muchas horas, metiendo el pasodoble una y otra vez, y yo prefiero los ensayos de los cuartetos.
–¿Es más difícil ganar un primer premio o mantenerse arriba?
–Ganar un primer premio. Es muy difícil. Llevo casi diez años y sólo me he llevado uno. Llegar a la final puede ser asequible, pero ganar es complicado.
–¿Qué vuelta se le puede dar al cuarteto para que vaya hacia arriba?
–Yo creo que con lo que hay está bien. La gente no se da cuenta ni aprovecha el buen momento que estamos viviendo. Estamos metiendo casi siempre dos o tres cuartetos en la final con un nivel bastante bueno. Antes sólo había uno o dos en condiciones.
–¿Con quién no se daría una vuelta por Cádiz?
–Con Aznar, porque tiene pinta de ser muy exaborío. Y seguro que ni se quiere disfrazar ni nada. Aunque con ese pelo y ese bigote ya va disfrazado.
–¿A quién no aguantaría que le pusiera de vuelta y media?
–Esas cosas me dan igual. Además, tampoco me han puesto verde nunca. Para eso se sale, y lo tienen que entender todos los carnavaleros. Nosotros ejercemos la crítica y estamos expuestos a ella.
–¿A qué le daría una vuelta en el Carnaval?
–Yo no soy nadie para cambiar nada. Lo único es que hacen falta más cosas en la calle, una organización acorde con la categoría de la fiesta. Conciertos en los tablaos, al estilo de otras fiestas como los San Fermines.
”En el cuarteto no hay tanta guerra; somos muy poquitos”
Con la chupa de cuero en el armario y ataviado con una discreta sudadera, el líder rockero con más ángel no paró de recibir felicitaciones.
Por J. M. Aguilera , 0:00 h.