El Jurado de LA VOZ: Aprietan pero no ahogan
La noche del martes deja a muchas aspirantes peleando por la final pero no alcanzan el primer puesto
Pasado el ecuador de esta fase semifinal del concurso, serían ocho las agrupaciones que se darían cita sobre las tablas del Gran Teatro Falla. Aún quedaban por degustar grandes agrupaciones, pues llegado este punto se imponen los grandes repertorios y las letras comprometidas.
La chirigota de Juanlu Cascana, envuelta en la polémica desde que comenzara el Concurso, volvía a subir sus ‘pasos’ al escenario. En esta ocasión las letras acompañaron la puesta en escena, y dieron un pasito al frente respecto a la fase de cuartos. Se rehízo el grupo luchando con contenido, como debe ser, sacando partido a cada uno de los detalles, y es que la capacidad creativa del autor a la hora de sacarle punta a la idea original es innegable.
No se puede olvidar la chirigota de Selu ‘Estrés por cuatro’, que arrimaba el hombro en la competición. La agrupación nos deleitó con pasodobles del corte del autor a lo que suma un segundo escrito con mucho ingenio y maldad, je je.
El coro de Pedrosa ‘La colonial’, nuevamente hizo los deberes poniendo paso firme hacia a la final. Un segundo tango contra el machismo, muy aplaudido en el Teatro, justifica la calidad literaria de la pieza. En la modalidad se puede hablar de una final adelantada pues el grupo de Faly Pastrana ‘Los garabatos’, es otro de los grupos que se encuentra bien posicionado para volver a ofrecer su repertorio próximamente.
En la modalidad de comparsa eran dos las que lucharían por alcanzar una plaza en la ansiada final. El grupo de Germán Rendón apostó por un contraste entre una letra de pasodoble reivindicativa sobre el pin parental y una segunda más sentimental al amor verdadero. Quizás al autor se le eche en falta una música que acompañe la indudable calidad literaria de sus obras. Por otro lado, David Carapapa ofrece una letra comprometida con el tema del Antifaz de Oro ante el rechazo de Antonio Trujillo, ‘el Catalán’ a recibir tal distinción. Que poquito queda ya…