Antonio Pedro Serrano, ‘El Canijo’, se enfrentaba a la fase de cuartos, “la más dura, la más difícil”. Y es cierto que se atraviesa. El público está más frío, desaparece el factor sorpresa, ya se conocen las bromas de cada chirigota en presentación y popurrí “y los puntos empiezan a contar”, señala el propio autor. “Puedes haber dado fuerte en preliminares, pero si aquí gustas menos te perjudica en el Concurso”, comenta el creador de ‘Chernobyl, el musical’. Aún así, la chirigota se mostraba satisfecha y relajada tras el pase, en el que se han superado en las partes variables. Dos grandes pasodobles y dos cuplés que conectaban con el aficionado.
Especialmente la segunda letra, en la que el Canijo reflexionaba sobre el machismo pero en primera persona. Comentaba sus discusiones con su hija, a la que ‘pica’ para que saque su carácter y le critique sus comentarios y actitud racistas. “Mi hija marta es la que da arañazos de gata. Es un caso real lo que cuento en el pasodoble. Yo la pico cuando veo algún comentario machista y lo aplaudo, y ella siempre responde. Me siento orgulloso de ella. Hay que adiestrar a nuestros jóvenes en estos valores y uno ve cómo ellos ganan conciencia”.
Bienvenido: “Mi regalo es que ellos lo disfruten”
Tiene 20 años, como su melliza Carmen, “que me dice que a ella no le digo nada. Algo le tendré que hacer”.
Junto a estos chirigoteros aparecía Jesús Bienvenido, que ha compuesto la música del pasodoble y la primera letra de medida, la que cantaron en preliminares. Por lo demás, entregó la partitura “y no sé nada más del repertorio. Por eso me han parecido maravillosos los pasodobles, me han encantado. Es una alegría y mi regalo es que ellos lo disfruten y lo defiendan a muerte porque les gusta”.