Es comprobable científicamente que los pulpos se sienten atraídos por el rojo. Así, que el idilio Paul-España fue por puro interés cromático. La misma intensidad de atracción que el viernes por la noche una docena de cefalópodos demostró por las calles del centro. Lo que atraía a estos Pulpos Pol -con independencia de que pueda gustarles o no el rojo del tinto con nieve- es la gente con ganas de escuchar.
Otras chirigotas callejeras como la creada por el Canijo para este Carnaval de verano -que se desarrolla desde el viernes y que ayer tuvo su segundo asalto- buscaban público por las calles y a la inversa. Un idilio de culebrón, complicado. Por que sin convocatoria oficial -salvo la de Facebook-, sin horarios ni plantel fijo de agrupaciones, buscar la bulla fue harto complicado para los presentes en las calles del centro.
Mientras que el carrusel de coros iniciaba con recorrido prefabricado, el carnaval de agrupaciones ilegales y legales y de romanceros iba por libre, apenas había empezado.
Más tarde, los improvisadores a pie aprovecharon el entorno del recorrido de Plocia, San Juan de Dios y Catedral. Un poco de Viña y otro tanto de plaza de las Flores, San Francisco o San Agustín.
La espontaneidad, como ya pasó el viernes, mostró la cara más desenfadada de febrero pero puso trabas al público para encontrar el ambiente. Pasar de bulla a bulla para escuchar a unas agrupaciones no es como en invierno, no fueron muy numerosas. Todo está desperdigado, aislado. Es más difícil
Entre las primeras que se dejaron ver, porque arrancaron muy tarde, estaban Las supernonis.
Lo importante era rentabilizar la salida nocturna con la extraña combinación de verano y Carnaval. Una suma extraña, aunque cosas más raras se han visto.
De hecho, para los que hoy no puedan acercarse al estío carnavalero de hoy, siempre les quedará agosto. Sí, agosto. Ya hay alguno que, también en la misma red social, aboga, con ironía y buen humor, por «repetir el carnaval de julio el próximo mes de agosto». Y si no siempre quedará un festival. Al final va a ser verdad de que en Cádiz todo el año es Carnaval.