Una tropa para llegar al descanso

Esta tropa del colorete ha puesto el punto y seguido a la noche,
cerrando la primer parte del concurso. Voces conjuntadas y corte
clásico en sus ritmos que han agradado al público.
Sin embargo, da la impresión de que a esta comparsa le falta algo de gancho y hay algo en los contraltos que no acaba de convencer. Sus pasodobles, de corte clásico y quizás demasiado tristes, han ido de menos a más, siendo el tramo final de ambos, sobre todo del segundo, dedicado a un militar que no puede estar con sus hijos la mañana de Reyes Magos.
Los cuplés han estado en la línea de seriedad habitual de las comparsas, subiendo algunos enteros en el estribillo.
Sin embargo, el popurrit ha brillado a un buen nivel, muy bien interpretado y con algunos cambios de ritmo producidos en el momento justo para que no se haga largo y un tanto aburrido.
Buena comparsa sí que es, eso no se le puede negar, pero quizás excesivamente triste, algo que comienza a ser demasiado habitual. La modalidad más seria del Concurso es ésta, eso está claro. Pero como ya he dicho en otras ocasiones, no se debe confundir seriedad con tristeza.