Complejo spa-ramao
El documento, calificado como secretísimo, ha sido
redactado por «Taller de Impulsos» el famoso equipo de diseño que se ha
encargado de las prestigiosas campañas de propaganda del Ayuntamiente,
uy, perdón, Ayuntamiento, que equivocación más tonta, de Gadibujito,
pueblecito marinero de la costa de Turquía. Yordi Moreno y Filo
Martínez forman este taller. Ambos son diseñadores de exteriores y
están especializados en la rama de grandes pegotes. Sus trabajos son
facilmente indetificables ya que siempre firman con el seudónimo «De
coco y huevo», por lo que son apodados en el competitivo y exclusivo
mundo del diseño como «Los surtana».
El
documento tiene un mogollón de páginas y destacan que si se lleva a
cabo su proyecto «Cádiz tendrá un museo como El Prado pero con
estribillo». La principal novedad que tendrá este complejo museístico
es que será el primer museo spa del mundo, siguiendo así las últimas
tendencias en materia de turismo descansao.
Así
las diferentes estancias serán visitadas por el público en posición de
spa-ramao, es decir tiraos en unas inmensas camas redondas de
metroochentaydos de diámetro. Cada una de ellas irá cubierta con un
edredón nórdico (del fondo Norte) realizado con plumas de gaviota de la
Caleta, para darle un «toque étnico» (resalta el documento). El somier
será de Lamas…ja,ja,ja.
Las camas como si
fueran el tren de los escobazos se irán moviendo por todo el museo
mediante railes de tren de cercanías con sistema antichirríos y a
velocidad de tres por cuatro.
Yordi Moreno y
Filo Martínez estiman que esta idea de visitar el museo en posición de
acostao es muy original y «muy practica. El que se aburre, pues se echa
una siestecita».
Otra de las grandes novedades
serán Ganso y Gansa, dos robots igualitos que los de la Guerra de las
Galaxias y que se encargarán de recibir a los visitantes cantando
Vaporcito de El Puerto.
Ganso llevará un bombo
y Gansa una caja y harán tipo para saludar a los visitantes. Bailando
los duros antiguos los dos ingeniosos cantantes ofrecerán a los
visitantes la posibilidad de ponerse un esquijama (versión gaditana del
pijama abrigaito) y visitar así el museo más «ambientados». En los
esquijamas irá el lema: «Cádiz, de fiesta todo el verano y de siesta el
resto del año».
Ya acostados, la visita
comenzará por la sala Tio de la Tiza para proseguir por el salón Batato
y el callejón del Carota, donde un robot vestío de guardia cantará un
cuplé borde.
Llegará entonces el primer plato
fuerte de la visita. La gente spa-rama entrará en un salón que simula
La Caleta y desde sus aguas emergerá Paco Alba sobre la piedra cuadrá
al tiempo que un coro de caballas canta un Aleluya titulado «A ti,
poeta en Conil».
En este momento un holograma
con la figura de El Purri saldrá de la oscuridad metido en un burgaillo
gigante y hará un solo de contraalto en si bemol, más bien sostenido,
mientras el robot Ganso saldrá de nuevo a escena para vender el casset
«Agua Clara Chilaut» un remix realizado por la coral de la Universidad
de Cádiz donde se fusionan el pasodoble de Antonio Martín con el
Porompero de Peret.
Tras el solo de El Purri en
burgaillo, que es la versión acomparsada de la Venus saliendo de la
concha, se entrará en la zona bautizada como los grandes tenores donde
se exponen las figuras hechas con cera donada por la cofradía de La
Palma de los grandes Contraltos de Cádiz.
Un
ascensor subirá las camas a la tercera planta donde los visitantes
podrán ver el corto «Generación Villegas» donde un émulo del Alemania
se arrancará cantando la presentación de Quince Piedras.
El
espectáculo final será el broche de oro. Un hada madrina encarnada por
María La Hierbabuena sobrevolará las camas de los visitantes y los irá
tocando con un plumero, con lo que los bendice carnavalescamente. Desde
el cielo llueven cassettes de Izquierdo Producciones. Fuegos
artificiales salen desde la casa de las Cuatro Torres.
Cañonazos
de papelillos se dejan ver desde Las Puertas de Tierra. Las ninfas
recitan a Pemán, el famoso jugador del Cádiz y de un huevo kinder
sorpresa sale el concejal de Fiestas, Vicente Sánchez, blandiendo el
pendón y recitando: «Visitantes, díganlo por el mundo. Sí, sí, yo lo
ví. No se pierdan acostaos el Carnaval de asquí. Gracias Cádiz, gracias
por dejarme venir. Difundirlo por el Universo: con el Ayuntamiento de
Cádiz, sí».