«Valoro al Canijo como mi padre carnavalesco»

 

Es inevitable asociar su cara a la chirigota del Canijo. Los premios no le quitan la ilusión, esa misma que tiene por repetir triunfo este año.

-¿De qué tipo guarda un mejor recuerdo?

-De espermatozoide en ‘Los que salimos por gusto’, fue mi primera Final sin tener que ir a comprar chucherias a la barraca, conocí casi toda España viajando y guardo muchos buenos momentos vividos con la chirigota.

-¿Qué se siente siendo lo más buscados por los niños?

-Depende del niño. Está el niño que te mira con ganas de conocer de cerca al personaje que ha visto por la tele (te sientes superheroe), y esta el otro niño que la ilusión la tiene el padre o la madre más que él de conocer al que está dentro del disfraz, ese niño suele ser más miedoso y lo suelen traer llorando o con miedo (te sientes el malo de los cuentos de Disney). Ahí queda demostrado que algunos niños son más inteligentes que sus padres

-¿Qué tipo nunca debió ponerse?

-A mí me gustan todos, de momento, pregúntame dentro de 5 años y te voy actualizando mi vestuario carnavalesco.

-¿A una piña es imposible darle un cajonazo, no?

-Este año no pueden dejar fuera a la piña, porque soy una piña colada.

-¿Tiene la sensación de cantar lo que escribe uno de los grandes?

-Sí, además de uno de los grandes en los dos sentidos de la palabra, grande por como maneja la pluma y grande por como maneja la cuchara. El Canijo es quien más me ha enseñado de Carnaval, así que lo valoro como a un grande y mi padre carnavalesco.

-¿Se ve cambiando de grupo en un futuro próximo?

-No me veo, pero como en el Carnaval nunca se sabe, no escupo para arriba.

-¿De qué le gustaría disfrazarse sobre las tablas del Falla?

-Dios, esta pregunta me encanta, tengo un montón de disfraces, de letras de abecedario, de hombre lobo rapado al 1, de grupo rociero en plan Ecos del Rocío, etc.