EN BUENA ONDA
Los ‘nacionalistas gaditas’ tenían preparada toda su artillería cuando se supo que Agustín Bravo iba a ser uno de los presentadores de la fase preliminar del COAC para la televisión municipal de nuestra ciudad. Hace muchos años, esos mismos criticaban que los encargados no eran gente preparada, aunque sí eran muy gaditanos y carnavaleros.
Muchas de las cosas que se criticaban, por adelantado como se hace en esta ciudad de las libertades, era acerca del poco conocimiento de nuestra fiesta que tenía Bravo, ignorando que en el equipo de presentadores había más gente, y sin saber como se desarrollaría todo. Pues finalmente creo que todos esos se han quedado sin argumentos para el critiqueo. Las retransmisiones han estado muy bien llevadas desde el palco por el propio Agustín Bravo y por Mayte Huguet, periodista de profesión y de carrera y con la cual estuve trabajando unos meses en este mismo periódico y ha demostrado un gran conocimiento de carnaval y haciéndolo de categoría. También estaba, un año más, Germán García en la zona de camerinos, escenario, etc. Si lleva tantos años será por algo, claro, a pesar de ciertas críticas repetitivas y absurdas. Y por último apareció el fichaje de este año: Pepito el Caja, quien animaba continuamente la retransmisión con sus desenfadadas entrevistas y ‘liando el taco’ en el Paraíso del Gran Teatro Falla, con su arte, buen humor y simpatía que lo ha hecho famoso en toda Andalucía, sin perder nunca su vinculación con Cádiz y su carnaval. Si antes hablé de Mayte, ahora de Pepito tengo que decir que lo conozco desde hace muchos años, sobre todo a través de nuestra fiesta, a la que él siempre ha apreciado y así ha demostrado en Onda Cádiz, y hace dos años en su chirigota en el Falla, y tiempo atrás en el carnaval callejero. ¿Lo veremos alguna vez en un cuarteto? Ojalá sea así, y pronto. ¡Anímate Pepito!
Por lo tanto desde esta modesta columna felicito a todos los presentadores de la fase preliminar de Onda Cádiz Televisión. Los ‘nacionalistas de Cai’ se han quedado, una vez más, sin argumentos.