Policías indignados con el balance oficial del primer sábado de Carnaval

La resaca del primer sábado de Carnaval aún perdura para algunos miembros del dispositivo que ha velado por la seguridad de vecinos y visitantes durante las fiestas que ayer pusieron su punto y final con el Domingo de Piñata. Una resaca aderezada con bastantes gotas de indignación después de leer el balance oficial que el Ayuntamiento hizo sobre lo ocurrido en la noche más conflictiva y de alto riesgo que se vive año tras año cuando llega febrero. Según el Consistorio y citando a la Policía Local, el primer sábado fue una «noche tranquila y sin incidentes». Los propios agentes tienen una visión completamente distinta y cuestionan que el Consistorio haya podido llegar a esa conclusión si consultó con los funcionarios que trabajaron esa madrugada.

Por eso, desde la Unión de Policía Local y Bomberos de Cádiz (antiguo SPL con fuerte representación en la plantilla municipal de agentes) han remitido una carta a la alcaldesa para que les aclare varios aspectos en cuanto al dispositivo que se había previsto para esa jornada. En el citado escrito, al que ha tenido acceso este medio, la UPLB recoge las informaciones que los compañeros que trabajaron esa noche les han trasladado y que dibujan un escenario muy distinto al que describió el Ayuntamiento en su nota de prensa. «Se vieron obligados a actuar en numerosas incidencias de altercados, reyertas multitudinarias con botellazos y solicitaron en reiteradas ocasiones la presencia de ambulancias para atender a ciudadanos heridos». En la carta, el sindicato recuerda que la Policía Local tenía encomendada solo la vigilancia del tráfico, pero que tuvieron que prestar servicios de seguridad ciudadana «por la incomparecencia de las unidades de intervención policial (UIP o antidisturbios) que se había acordado en la Junta Local de Seguridad». Unos equipos policiales que se venían desplazando desde Sevilla en los últimos años pero que el pasado sábado de Carnaval no vinieron a reforzar el dispositivo.

La UPLB sospecha que se han incumplido acuerdos alcanzado en la citada junta por parte de la Administración central (Subdelegación) y pide a la alcaldesa que les remita copia de lo que se decidió en la reunión donde quedó fijado el dispositivo de seguridad para las fiestas. Entre las preguntas que le formulan a la regidora está si va a pedir responsabilidades por estos incumplimientos.

La misiva enviada a Alcaldía recoge además «la indignación» del colectivo de policías locales ante la definición de noche tranquila y sin incidentes que realizó el Ayuntamiento al día siguiente de la madrugada conflictiva. «Nos preocupa gravemente cuando choca esta supuesta tranquilidad con la multitud de incidentes y actuaciones llevadas a cabo por la Policía Local; sin olvidar, por supuesto, las practicadas por los compañeros del Cuerpo Nacional de la Comisaría de Cádiz, que a buen seguro fueron las mismas o más que las realizadas por nosotros».

La lectura positiva y amable que hizo el Consistorio de una noche que año tras año genera numerosas críticas y quejas de los vecinos del casco antiguo, molesta y mucho a los policía municipales que estuvieron de servicio esa jornada, insistieron fuentes del UPLB. «Viene a ser una verdad a medias. La botella puede verse medio vacía o medio llena, según interese hacer ver a la opinión pública. ¿Pero hasta cuándo van a estar jugando con la seguridad y la integridad de los agentes en eventos de esta envergadura?».