La chirigota pide el VAR: hay que verla de nuevo
Luismi Rossi y Kike Remolino se unen a Álvaro García para superar a 'La familia Verdugo', a Puigdemont y dar un salto adelante
Ha sigo gol, ha entrado. ¿Seguro? Pedimos el VAR y… ahí estamos, esperando. La chirigota ‘Los varbateños’ ha tirado de todos los recursos legales para que los trencillas le concedan la oportunidad de verla de nuevo. Su repertorio ha sido completo y equilibrado de principio a fin y se han marchado con una sincera e inesperada ovación, al grito de ‘chirigota, chirigota’.
El periodista Luismi Rossi y su inseparable amigo Kike Remolino se han unido a Álvaro García y a los chiclaneros de ‘La familia Verdugo’. El trío ha parido una agrupación de mayor calidad que en ediciones anteriores especialmente por la idea y el desarrollo. El video arbitraje, la estrella del Mundial y de la Liga española en esta temporada, se ha colado en el Carnaval de Cádiz y en el Gran Teatro Falla. “Es clave en el repertorio. Que sea buena y que tenga recorrido, que no se quede sólo en el nombre”, apunta Rossi.
Rossi ha escrito en años anteriores a diversas agrupaciones de la cantera y ha colaborado en la sombra en alguna ocasión, pero éste ha sido su bautizo “y las sensaciones son mejores de las esperadas”. Sabe que “este Concurso merece un mínimo de calidad, y además esta chirigota es una gran familia, de verdad. No quería hacer un experimento y hemos trabajado para mejorar los últimos años”.
Los Varbateños
En 2018 esta fue una de las chirigotas más polémicas del COAC. Y sin comerlo ni beberlo. Durante el popurrí de ‘La familia Verdugo’ ajusticiaban de manera metafórica a Puigdemont, y eso trascendió a los medios nacionales de manera descontextualizada, donde se cebaron con críticas hacia la agrupación. “Al principio se tomó con humor porque en realidad no pasaba nada, pero luego empezaron a llamar desde todos los medios y pasó de pesado a pesadilla. Se habló de una denuncia por incitación al odio, aunque luego quedó en nada”.
Todos esperaban un primer pasodoble recordando ese momento “y precisamente por eso no lo hemos cantado, para no ser previsibles. Hemos metido algún detallito, pero ya quedó atrás. ¿Si uno se lo piensa mejor a la hora de escribir? Puede ser, pero esta chirigota seguirá siendo crítica y llevamos un pasodoble a Cataluña que seguro a alguno molestará”.
En cuanto a su recorrido en el COAC, “venimos a concursar así que nuestras aspiraciones son pasar de fase“. A ver qué dice el VAR.