Ha sido un placer
Antes de comentar mi última colaboración de este año con ustedes quiero decir que para mi ha sido un placer poder hacerlo.
Ya entrando en materia, imaginaos, por un momento, mi querido puñaito de lectores, esto que os paso a contar. Imaginaos que los autores de coplas para el Carnaval de Cádiz se ponen de acuerdo y deciden un «paro biológico» y un año dejan todos de escribir.
Imaginaos un Carnaval sin coplas, porque las de fuera cuando acaba el concurso ya no vienen más, y ¿qué nos quedaría? yo os lo voy a intentar explicar. Nos quedaría una ciudad en la que una noche (primer sábado de cartel) se vería sitiada por toda la escoria de Andalucía que al grito de «ezto ej cajnava» convertirían nuestras calles en una sola noche en un gran y apestoso estercolero. También nos quedaría un absurdo alumbrado «especial» en nuestras calles que nos haría acordarnos de todos los pueblos de cuarta caregoría de España. Y nos quedaría una churrería en pleno centro de la ciudad (como si en Cádiz no supiéramos dónde adquirir verdaderos churros durante todo el año). También nos quedaría Tere la de la tartana y el paponazo, y unos chiringuitos que venden coco (con lo poco que a los de Cádiz nos gusta el coco) y «disfrutaríamos» contemplando una Plaza de San Juan de Dios a la que a la mismísima alcaldesa le daría verguenza contemplar. Y una Cabalgata mojonera aunque aquí se le llame magna…y muchas cochambres más. Lo dicho Cádiz sin coplas no tiene Carnaval sino una gran cagada al servicio de nuestros visitantes.
Que ustedes la disfruten y hasta otro año……¡si me llaman!
Salud.