De la chusma selecta a la ‘Arestocracia’ de barrio
Martínez Ares se inspira en la comparsa de 'Los fabulistas' donde salió su padre y rinde tributo a Juan Carlos Aragón
Antonio Martínez Ares: “Intento competir conmigo mismo”
Ares: “El legado que deja Juan Carlos Aragón es absolutamente grandioso. Y el que pueda que empate”
Antonio Martínez Ares: «Cuiden el Carnaval. Es una industria y puede ser la antesala de mucho trabajo»
Ares: «Con tantas malas canciones que se escuchan, está bien que suene Carnaval»
Ares: «Después de ‘Los piratas’ han llegado ‘Los santos’, ‘Los millonarios’, y es que la comparsa evoluciona»
El primer recuerdo, el primer disfraz, el pecado original. Antonio Martínez Ares da pasos adelante mirando hacia atrás, a los clásicos. En su mente esos días en los que apenas levantaba unas palmas del suelo y acompañaba a su padre con el tipo de ‘Los fabulistas’, la comparsa de Paco Alba (69). Aflora esa vieja imagen, quizás mezclado el subconsciente con alguna fotografía robada, pues sólo tenía dos años en aquellos días.
Pepe es la referencia de su hijo, del niño, y su influjo recorre su columna desde su infancia hasta la madurez, en su crecimiento continuo. “Recordaba aquella comparsa, aquel disfraz de fabulista, el verde aceituna. Siempre tengo presente ese Carnaval antiguo, y la vez quería hacer un homenaje a Juan Carlos Aragón. He unido todo ello” y nace “la ‘Arestocracia’ de barrio. Juan Carlos definía a su público como la chusma selecta y este autor le canta a eso, a su arestocracia de barrio”.
El tipo no es del todo uniforme, aunque el maquillaje ofrece continuidad. Aristócratas de los siglos XVII y XVIII, algunos franceses, otros ingleses (el vestuario es del veterano y prestigioso Manolo Odriozola). En conjunto, una comparsa de época, “que es sólo fachada”, como la aristocracia, “como todo, como todos”. Y se dará cuenta de que la vida es otra cosa. Que no es más que Carnaval. ¿O hay otra cosa?
Vestuario: Manuel Odriozola
Atrezzo: Achicarte
Peluquería: Sonia Moreno
Maquillaje: Camerino de Artes y Horrores