Los borregos

Letra y música: Miguel Ángel García Argüez y José Antonio ‘Nene’ Cheza Martínez
Localidad: Cádiz
En 2014: Los gallitos

Paso por semifinales:

San Benigno: Silencio que están aquí los borregos. ¿Así se llamaba la película? ¿No? Pues da igual, esta vez nos vale. La música de Nene Cheza y las letras de García Argüez son motivo más que suficientes para escucharlos. Van con el primero de sus pasodobles. No eres mi novia, ni mi madre, ni mi amante. No eres mi hembra, no sé lo que eres, pero quién le pone nombre a lo que no lo tiene. Quién necesita promesas si dejas tu olor en mi cama caliente. Me gusta encontrar tus braguitas en el suelo más que ver tu ropa colgada en mi armario. Lo nuestro es nuestro, qué sabrá San Valentín de cuerpos que se visten solo con su cuerpo. Nuestro amor no tiene corral, ni dueño. Es mucho más que el aburrimiento del amor de los borregos. Y ahora el segundo, otro de esos que te hacen pensar. Quiero decirte las cosas claras. Enfoca que esta es mi cara, le dicen al cámara de Canal Sur. Te hablo del mojón de una programación tan rancia que trata a los andaluces como unos catetos con el culo rosa. No van a hablar de las uvas. Pero qué identidad de boina y camisola, qué basura es esa de la pandereta y la bata de cola. Y encima flipa con los sueldazos que ganan mientras recortan personal. Lo único claro, que se entere Canal Sur, es que esa tele no es la nuestra. Quedársela para ustedes, porque a mí me da vergüenza. Levantan al Falla. Regular los cuplés. Cantan mejor en este pase. Notable alto, por lo menos.

El Maligno: Con este tipo es difícil creerte los pasodobles. No veo yo a una oveja tirando las braguitas al suelo. Además, ¿las braguitas serían de borreguito? Qué pechá de sudar.

Puntuación:**

ANTONIO MUÑOZ DE LA VEGA

Paso por cuartos:

San Benigno:Que no nos engañen con su piel de cordero. No tienen nada de esos borregos de vida aburrida que nos quieren presentar. No sé si llegan a lobos, pero si lo son, déjense comer, que lo van a disfrutar. El primer pasodoble se lo dedican a la Familia Real. Van comparando a sus miembros con cartas de la baraja española. Pero ninguna puede salvar al rey ni a sus castas en democracia, que aquí jugamos todos o rompemos la baraja. El Chapa se exprime el cerebro para hacer letras siempre originales. Eso no se le puede negar. En la segunda letra hablan de una noche negra bajo la luna en una esquina de La Laguna. En un banco se besa en secreto una pareja. Él se llama Mohamed. Ella, Charito. Se dicen las palabras torpes del amor chiquito de unos aprendices. Son felices con unas salchipapas y unos refrescos. Sus labios están muy lejos del terror y los crímenes que no se olvidan. En ellos podemos ver la verdadera cara de otra Europa. Esos chavales son el triunfo del amor. Aún queda esperanza. Los cuerpos existen, pero no existen las razas. Cuplés al riesgo de tsunamis en Cádiz y su insomnio. Son tan tiernos… que los adoramos.

El Maligno: Hoy han controlado más su fuerza, pero por momentos se les sigue yendo el tono por arribita. Demasiado, si son ovejas. Meter la palabra salchipapas en un pasodoble es de genio, he dicho.

Puntuación:***

ANTONIO MUÑOZ DE LA VEGA

Paso por preliminares:

San Benigno: De borregos, jugando con el doble sentido. Personas que hacen lo que les dicen, que no piensan por sí mismos, reflejo de la sociedad actual. Sus tipos imitan a la de la piel del animal. El primer pasodoble es una crítica a los autores de Carnaval que piensan que ellos son la voz del pueblo. Defienden que la verdadera voz de la calle es la de los que luchan en manifestaciones, la de estudiantes, la de los parados, la de los que lo pasan mal. Esa es la voz verdadera y no la tontería que cantamos aquí en el Falla, defienden.

En la segunda letra apoyan a la mujer de ahora, actual y que lucha por sus derechos, frente a quienes prefieren las costumbres de antes, esas que ya forman parte del pasado. Tú no eres machista, tú eres carajote, sentencian los comparsistas. Bajan un poco el buen nivel de los pasodobles en los cuplés. El primero, crítico, lo destinan a marcar sus preferencias electorales, que no pasan por votar a la actual alcaldesa. En el segundo relatan lo que harían ellos con las supuestas tarjetas black. El popurrí, reivindicativo de principio a pie, en el que narran el comportamiento de la sociedad actual. Buenas cuartetas, en las que enfocan la temática con músicas dinámicas y divertidas para una idea profunda, con mucho contenido.

El Maligno: Qué pechá de dar palos y qué intensidad. Con todo lo que dicen, no hace falta levantar tanto la voz.

Puntuación: ***

NURIA AGRAFOJO