La plaza de Colón, ayer noche, presenció el pregón del Carnaval 2014 que ofreció la Antología de Los Majaras. Antes de comenzar su actuación se nombró a la Coquinera Mayor, tanto en categoría adulta como infantil. Los galardones fueron para María Arana Figueroa y María Quevedo Soto, respectivamente. También se realizó un homenaje a título póstumo al conocido fotógrafo portuense Rafael Ortiz Vinuesa, conocido como ‘Faly’, y se le entregó un diploma honorífico a su esposa, que fue acompañada de su hijo.
A partir de ese momento se dio paso a las letras de carnaval. Se abrió el telón, y se pudo contemplar una recreación de la barbería Taly, en la calle Ganado, justamente frente de la peña Los Majaras. Allí acude Pedro ‘el de los Majaras’ para cortarse el pelo, aunque como el dice, «hay poco donde cortar». En la barbería, Enrique Miranda hacía de peluquero junto con su aprendiz, un tal ‘Filete’ que enseguida se ganó al público allí presente. Sabiendo que cerca del lugar había un casting para cantantes, uno a uno los componentes de la agrupación se acercaron a la peluquería para preparase antes de ir a la prueba. Simulando el programa televisivo ‘La Voz’, Pedro gira el sillón cada vez que escucha cantar a sus compañeros tanto por carnaval, flamenco o incluso al propio Raphael.
Tras presentarse uno a uno, cada componente de la agrupación hacen entrega de su currículum, en el que muestran toda la trayectoria carnavalesca que han recorrido a lo largo de su vida. Otro de los que acudió al acto fue autor Antonio Rivas, que se mostró muy agradecido a la agrupación. Poco a poco el escenario se llenó al completo de la Antología, que recordó letras clásicas que han pasado a la eternidad. La presentación de la comparsa ‘Israel’, el popurrí de ‘Raza Mora’ o el tradicional pasodoble de ‘Un cuatro de diciembre’ sonaron en una plaza que se llenó para presenciar a un grupo que ayer tocó el cielo pregonando las fiestas de su ciudad.
El propio Pedro ‘el de los Majaras’ anunció que para el año próximo volvería con su grupo a las tablas del Teatro Falla, momento en el que recibió un gran aplauso de los allí presentes.