Final de cuatro

Hazle caso al Momo

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Ahora que el final del concurso se divisa en el horizonte, un horizonte cada vez más cercano, ahora que el día 23 de enero (fecha de inicio del concurso) parece muy lejano, ahora que estamos ya a punto de comenzar la fase semifinal y habiendo visto el nivel que hay en todas las modalidades, reivindico, un año antes del próximo concurso, la final de cuatro. Yo aventuro que el año que viene se volverá a ese formato de final, y no porque yo lo diga, sino porque las cosas caen por su propio peso. Vale que puede ser que haya habido años que a lo mejor había un escalón muy grande entre el cuatro y el tercero, por lo que los cuartos premios iban un poco de relleno, pero resulta que la mayoría de años no es así. Sin ir más lejos, este concurso tiene muchas más de tres agrupaciones por modalidad con calidad más que suficiente para entrar en la Gran Final. Y eso se nota al oír las quinielas de los aficionados donde es difícil encontrar muchas apuestas que coincidan. No quiero dar nombres para evitar susceptibilidades, pero no me negarán que, por ejemplo, en la modalidad de chirigotas, se va a producir una gran sangría en el pase a la Final. Y en comparsas y coros igual. De acuerdo que hay que poner un límite de agrupaciones que canten en la última función, es decir no pueden pasar todas las que tengan calidad, siempre se tendrán que quedar algunas buenas fuera, pero el número de tres me parece demasiado corto, primero por el número de agrupaciones que participan el porcentaje es ínfimo y segundo y más importante por la calidad existente.
 Que conste que hablo desde el punto de vista del aficionado, que también lo soy y no pensando en las agrupaciones. De hecho las agrupaciones a priori todas quieren entrar en la final y sólo el que queda cuarto es el que luego prefiere la final de tres, pero siempre a posteriori. Repito que creo que el año que viene volverá la final de cuatro y también pienso que los fines de semana habrá concurso y no como este año. Y punto.