El ‘gusanillo’ de las tablas también pica a los de fuera

Cada vez son más las agrupaciones que, tras debutar en la casa de los ladrillos coloraos, repiten experiencia en el concurso del Falla

Por  9:38 h.

Los aficionados al Carnaval que conserven buena memoria seguro que
se acuerda cuando Antonio Pedro Serrano ‘El Canijo’ venía al Gran
Teatro Falla las primeras veces. Uno de sus momentos ‘estelares’ tuvo
lugar con el cuarteto Al compás de mi cohetillo que, como él mismo
confesó hace poco en estas mismas páginas, era para «darle un
babuchazo». Sin embargo, posteriormente,  fue perserverante con su
grupo de Carmona hasta que consiguió meterse en semifinales. Eso sí,
tuvo que emigrar a Cádiz, carnavalescamente hablando, para entrar en
una Final y llevarse el primer premio de calle, como ocurrió en 2005
con Los que salimos por gusto.
Pero hay gente que mantiene una fidelidad importante con la casa de los
ladrillos coloraos aunque nunca se lleve un premio o, ni siquiera,
consiga pasar a semifinales. Precisamente este año el primer fallo del
jurado ha sido condescendiente con alguno de esos grupos que han
acumulado, al menos, un lustro de experiencia en el certamen de coplas
del Falla. Uno de ellos es la chirigota de San José de la Rinconada,
Ojú que cabeza tengo, cuartofinalista en la presente edición, y que
debutó por primera vez en 2005 con Los que viven del capullo, un leuro
y es tuyo y, seguidamente, volvió con La Familia Addams, Las suegras y
Un mal día lo tiene cualquiera. Algo similar se puede decir de la
chirigota de Écija Los tontotienda que hizo su primera comparecencia
con Los bilielniño y repitió Los absorbíos por un ovni saborío, Los
bailando con lobas y Los carajaula.  Entre las ‘fieles’ clasificadas
para esta segunda fase también se encuentra la chirigota de Sevilla
Cuidao que voy, que hace cuatro años fue finalista con Esto es pa
verlo.
Otro ejemplo de perseverancia que hay que reseñar es el la chirigota de
Chiclana Los míster, que en esta edición ha cumplido su decimotercera
presencia con la única alegría de Los tu si, tu no, tu no, tu si….
que en 2008 llegó a cuartos. Sus paisanos en lamodalidad de comparsas,
Los rompecorazones, también se han convertido en fijos y además se han
situado en los lugares punteros.
Coros
En coros donde más pica el gusanillo es en San Fernando y Puerto Real.
En el primer caso, el máximo exponente es el de la peña Colorín
Colorao, aunque el otro grupo ya se encuentra muy asentado en la nómina
de actuantes. En el caso del de La Villa estamos hablando de uno de los
más longevos que acuden al certamen. Sevilla ya acumula cinco años de
trayectoria en la modalidad con Cantinero de Cuba.
En chirigotas, los mayores exponentes se encuentran en Algeciras con
Los quinquis de los 80 y en Puerto Real, con los dos grupos, el de
Felipe Marín y el Toté, que suman ya varias presencias consecutivas.
Comparsas
Por otro lado, en comparsas una de las foráneas fijas es, curiosamente,
uno de los cajonazos de la fase previa de este año, la cordobesa de Los
malaventurados. Junto a ellos los barbateños de Cardoso que también
sufrieron los sinsabores del jurado con La clase obrera. Asimismo hay
que referirse a los dos grupos que llegan desde Sevilla. Por un lado,
los herederos de Los majaretas y por otro la comparsa femenina que,
tras debutar hace unos años con Las rameras, se ha mantenido fiel a su
cita con el certamen.  En este repaso hay que incluir a la comparsa
algecireña de José María Durán, que no sólo viene al Falla, sino que
incluso supera la primera fase como lleva haciendo durante cuatro años
consecutivos. Lo de los majaras, lógicamente, merecería un capítulo
aparte.
Finalmete en cuartetos, la presencia foránea se reduce casi de manera
exclusiva al de Sevilla y al de Algeciras. En el primer caso tras
varios años vieniendo al Falla han decidido no hacerlo en 2010,
mientras en el segundo ya se sabe que concursan o no en función de la
circunstancias.

Otras que se han quedado en el intento
En el polo opuesto aparecen ejemplos de grupos de fuera que han venido
al Falla y, de repente, han dejado de hacerlo. El caso que más se viene
a la memoria es, precisamente, el de la chirigota de Carmona del
Canijo. Poco tiempo después de que se fuera su ‘alma mater’  decidieron
abandonar su aventura y, de momento, no han regresado. Igualmente, se
echa de menos en la nómina de actuantes a la comparsa de Úbeda, que se
llevó nueve años seguidos viniendo al Falla y a las de Ayamonte y
Marbella, que en alguna ocasión superaron la fase previa. Sin embargo,
también hay gente que regresa tras varias ediciones como ha ocurrido en
2010 con Los matarile ceutíes.