CARNAVAL 2017

Antonio Martín: «Está llegando gente con ideas nuevas y creo que sobro»

El autor se despide como una leyenda del Carnaval

Por  2:19 h.
Antonio Martín: «Está llegando gente con ideas nuevas y creo que sobro»

«Perdona, es mi última noche. Aquí se acaba la historia del niño de San Vicente». Así se despide Antonio Martín García, después de 50 años cantándole a su Cádiz. Y dice adiós de la manera en que sabe hacerlo, en forma de copla, con un emotivo segundo pasodoble interpretado por su comparsa ‘Ley de vida’. Los últimos sones se pierden entre los aplausos de un Teatro Falla en pie, que durante varios minutos dedica una estruendosa e histórica ovación al trovador de su tierra.

El telón caía mientras el grupo se marchaba al ritmo de Caleta. Es la última imagen, la que evocará la memoria en años venideros, en un futuro que pierde al gaditano que más le ha cantado a su tierra.  Detrás del escenario, adonde no alcanzan los ojos del espectador, todos se fundían en un abrazo con el coplero, con su director Pedro Ramos aferrándole del brazo para que la emoción no le llevara a perder el equilibrio.

Pero la lucidez de Martín es asombrosa. La demuestra año tras año, premio tras premio, Carnaval tras Carnaval. Las palabras brotaban de su garganta, sin quebrarse pese a las lágrimas que aparecían en su rostro. “Estoy emocionado, pero sé que ha llegado el momento. Me tengo que ir. Me esperan mi mujer Amparo y mis hijos. Estoy sobrando un poco”, confiesa a pesar de que ese pregón duela tanto como su adiós. “Está llegando gente con nuevas ideas y veo que sobro. Al menos, hoy he estado con Cádiz, con mi gente. Mañana no sé, por eso me voy”.

Antonio Martín dejaba su testamento en vida con la copla de ‘Los héroes del 3×4’. “El día que yo me muera, que nadie me traiga flores, que nadie encienda una vela y por mí que nadie llore”. “Quiero que me recuerden de esta forma: ‘ahí va un viñero, un coplero de Cádiz’. Porque nosotros no hacemos canciones sino coplas. El Carnaval es cantarle a la gente, a la Viña, no tanta filosofía e historias raras. Cádiz es más fácil, no hace falta tener un libreto al lado para entenderla”.

No desea que se le malinterprete. “El Carnaval está en muy buenas manos, de autores grandes como Martínez Ares, Aragón, Tino Tovar y Bienvenido, pero si me permiten les doy sólo un consejo: que no olviden a Cádiz, que acabarán perdiéndose”.

Confiesa que al principio no quería salir “porque tenía miedo de que nos descalificaran por alguna regla extraña. Pero me ha insistido Pedro Ramos y el público me ha dado una ovación que queda para mi vida“.

Semifinal. Aún queda un último pase si el Jurado así lo desea, pero este pasodoble puede sonar a despedida final. Martín, tozudo hasta el final, se resiste a arrojar la toalla y ya tiene pensado qué hacer en la final. “Si pasamos, tengo once pasodobles así que no hay problema. Haré una encuesta entre mis aficionados para elegir cuál quiere que repitamos”. Ese sí sería su último día porque, con el beso a las tablas, quiere decir que “ya no voy a venir más”. Demasiado seguro está.  

 



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